Las calles de Barcelona se han llenado este domingo de cientos de miles de manifestantes (más de un millón según los convocantes, 300.000 según la Guàrdia Urbana) en defensa de la unidad de España y la “normalidad institucional”.
La marcha tiene lugar un día después de que el Gobierno español haya tomado el control de las instituciones catalanas en cumplimiento del artículo 155 de la Constitución que el Senado activó el pasado viernes.
Esta mañana, la cúpula de los Mossos d’Esquadra ha ordenado a sus agentes retirar todas las imágenes oficiales de exmiembros del Govern catalán de las comisarías y edificios oficiales de la policía autonómica.
Tras la destitución de todo el Govern y el relevo al frente de los Mossos d’Esquadra de Josep Lluís Trapero, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría asume la mayoría de competencias del presidente y el vicepresidente de la Generalitat. El expresidente catalán Carles Puigdemont no se da por destituido y mantiene el pulso por la independencia.
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