San Juan del Río.- Durante el foro ciudadano para la actualización del plan de Desarrollo Urbano del Centro Histórico, en San Juan del Río, el especialista del Centro de Investigación y Análisis del Territorio (CIAT), Ignacio Kunz Bolaños, dio a conocer que el centro de San Juan del Río vive fenómenos complejos de valorización y proletarización que, de no controlarse a tiempo, derivarán en un mayor deterioro de la imagen urbana.
El especialista, aseguró que pese a los esfuerzos realizados por el gobierno municipal, para mejorar la imagen del centro histórico a través del mantenimiento de las fachadas, sustitución de adoquines y pavimentos, esto no será suficiente mientras no exista la aplicación estricta del reglamento de comercio, “no es suficiente la inversión en la dignificación de los espacios públicos, si no se tiene aplicada la ley de comercio, porque por un lado tenemos un comercio muy changarrezco que sustituye a viviendas que no son patrimoniales, al tiempo de que genera una zona con un uso muy intensivo y potencialmente deteriorante. Aunque todavía no afecta directamente al centro, sí está a un lado por lo que de mantenerse la tendencia el fenómeno podría afectar el área de monumentos históricos”.
Kunz Bolaños, dijo haber ejecutado un un análisis sobre la dinámica poblacional en la que se identifica un despoblamiento del centro histórico a través de casas abandonadas y espacios que son complicados de comercializar por el elevado costo en el que están valuados.
Además se detecta que hay un cambio acelerado en los giros pues las manzanas se han convertido en áreas comerciales y el uso de los inmuebles para vivienda es menos frecuente.
“El patrimonio corre el riesgo de deteriorarse y rescatarla después resulta más costoso. Si queremos la recuperación necesitamos que se bajen los criterios que pueden ser excesivamente patrimonialistas que limitan la inversión. Sí hay que proteger el patrimonio, pero hay que hacerlo con criterio”.
Destacó que al existir demasiada restricción no puede haber inversiones, se limita la rehabilitación y se genera un efecto contraproducente.
POR: ROSSY MARTÍNEZ / CORRESPONSAL