PALABRA UNIVERSITARIA
Mauricio Kuri y el terrorismo venezolano
El pasado 7 de febrero de 2019 los senadores del Partido Acción Nacional (PAN) y con especial énfasis Mauricio Kuri, organizaron y promovieron la presentación en el Senado mexicano del terrorista venezolano Lorent Saleh, criminal ex convicto acusado de por lo menos cinco actos delictivos en su país (y también en Colombia) por los cuales estuvo en prisión por cuatro años, hasta que se fingió demente y con tendencias suicidas para que el régimen “dictatorial” de Nicolás Maduro por razones humanitarias lo pusiera en libertad, lo cual como todo un “dictador”, el presidente venezolano hizo de inmediato. Una vez liberado, Saleh reactivó con más fuerza que nunca sus actividades de proselitismo y terrorismo en contra del gobierno chavista. Y precisamente una de esas actividades fue patrocinada por sus amigos de la derecha mexicana pertenecientes al PAN el día mencionado.
El terrorista había sido deportado de Colombia en el 2014 acusado de ser un extranjero que “atentaba contra la seguridad nacional, el orden público, la salud pública y la tranquilidad social”, y fue evidenciado en algunos videos donde junto con otros de sus colegas planeaban llevar a cabo actos armados en Colombia para generar caos y desconcierto con el fin de relacionar todo ello con el gobierno de Venezuela. Existen muchas evidencias de que Lorent Saleh tiene nexos cercanos con el grupo colombiano “Tercera Fuerza”, agrupación de ultraderecha que abiertamente ha declarado su simpatía por el nazismo. En su cuenta de “facebook”, el mismo Saleh aparece en fotos con varios miembros importantes de dicha agrupación neonazi.
Al mismo tiempo, Lorent Saleh pertenece a una de las facciones más radicales de la ultraderecha venezolana, la cual en años recientes organizó las llamadas “guarimbas”, marchas de la oposición venezolana donde quemaron vivos a por lo menos 28 personas sólo por parecer simpatizantes de Chávez, lo mismo que quemaron hospitales, escuelas y mercados. Son los mismos que han intentado boicotear las elecciones venezolanas amenazando, acosando y asesinando simpatizantes chavistas para evitarles acudir a los centros de votación.
Cuando Saleh estuvo en Colombia no sólo realizó actos de abierto proselitismo en favor de la ultraderecha de dicho país, sino que violando todas las leyes internacionales de no injerencia y sin ser ciudadano colombiano, tuvo el atrevimiento colarse a un acto político para enfrentar al ex guerrillero Antonio Navarro Wolff, en ese entonces candidato a Senador, para exigirle (lo mismo que exigió el 7 de febrero en el Senado al Presidente López Obrador) que interviniera en contra de Nicolás Maduro apoyando a la oposición venezolana.
En dicha ocasión, el ex guerrillero le contestó: “No te metas en asuntos de Colombia”, ante lo cual el terrorista con la clara intención de provocar un altercado con el candidato lo llamó “cobarde”, insulto que en efecto, provocó el enojo del ex guerrillero quien volteó rápidamente hacia Saleh exigiéndole respeto, oportunidad que el criminal aprovechó para decirle con todas sus letras: “Pégueme, pégueme viejo”. El desagradable altercado quedó plasmado también en videos que pueden consultarse en la red.
Esa misma exigencia que el terrorista hizo al ex guerrillero Navarro Wolff, se la hizo el pasado 7 de febrero al presidente López Obrador, en donde prácticamente lo acusó de que al ser neutral estaba del lado de “el dictador”. Al hablar en el recinto senatorial, a su lado aparecen con cara de orgullosos varios senadores panistas, Mauricio Kuri en primer plano, quien un día después de haber introducido al terrorista al Senado, en nombre del PAN hizo una declaración refiriéndose a un altercado que Saleh había tenido con un ciudadano español (quien al parecer funge como asesor de una senadora de MORENA), y habría enfrentado al terrorista a la salida del Senado para increparlo y decirle que “pedirle a un Presidente que apoye un golpe de estado, eso sí es una falta de respeto”, en dicha declaración Mauricio Kuri dijo: “Por supuesto que vamos a hacer un extrañamiento al Senado. Estamos revisando su situación migratoria (¿del terrorista Saleh?, no, del español que increpó al criminal venezolano), y estamos viendo qué es lo que se puede hacer para que esto no se vuelva a repetir. No vamos a dejar esto impune, vamos en una ruta para que este muchacho (¿el terrorista Saleh?, no, el ciudadano español) o se atiene a las políticas que debe tener el Senado y trata con respeto, o sino pedirle al Senado de la República, que sea despedido y no pueda entrar más aquí para increpar a los invitados (¿a los criminales por ellos traídos al recinto soberano?).
Según el panista Kuri, el español asesor de la Senadora habría cometido actos ilícitos por haber criticado a unas senadoras panistas, en cambio el terrorista por ellos invitado se habría comportado de manera pulcra al exigir sin autoridad moral o legal alguna, que el Presidente de todos los mexicanos apoyara no sólo un golpe de estado criminal contra Venezuela, sino una invasión armada de trágicas y mortales consecuencias. El senador Kuri olvida que él está para obedecer las órdenes de los ciudadanos queretanos, no para llevar criminales a una soberanía como el Senado de la República sin pedir autorización. Bien haría este senador en explicarle a sus patrones los ciudadanos cuál fue la razón por la que llevó a este delincuente Lorent Saleh a un recinto tan importante para nuestro país.