Pelear más apoyo presupuestal para la educación pública es uno de los principales compromisos del senador Gilberto Herrera Ruiz, quien apuesta por una nueva cultura política, sin falsas promesas ni derroche de los funcionarios. Entrevistado en vísperas de la primera sesión de la Cámara Alta, dijo que se aprobará los recortes a los gastos del inicio de la Legislatura, comenzando por más de 200 millones destinados a los miembros del Senado.
Los recursos deben irse a educación, salud, alimentación, etc. indicó, recordando que como rector peleó muchos años el presupuesto y le decían que no había dinero y ahora está viendo que por lo menos en donde se aprueba sí tenían. Este año ahorrarán más de 600 millones y mil 500 el próximo.
Deben acabarse los privilegios, sentenció Herrera Ruiz, incluido el fuero y establecer la revocación de mandato presidencial a los tres años para que no se incumplan los compromisos.
Sobre sus temas prioritarios como legislador manifestó que estarán educación, ciencia y tecnología, y fomento económico, en el renglón del petróleo para recuperar la gran empresa que fue Pemex. Que se retomarán las leyes de la materia con la participación de la gente.
En relación a los incidentes en San Lázaro al instalarse la Cámara de Diputados contestó que hay mucha gente indignada por lo de los 43 y esos son canales de desahogo, porque al final de cuentas un gran sector de la bancada de Morena está en desacuerdo con la percepción de algunos líderes de partidos sobre las reformas estructurales y el informe de que se entrega un gran país. Expresó el senador Herrera que el Poder Legislativo debe se autónomo y un contrapeso al Ejecutivo.
Sobre los presupuestos para la educación, afirmó que buscarán al secretario de Educación Pública para analizar las bolsas adicionales para las universidades.Respecto de la amnistía se dijo partidario de revisar el tema, porque hay muchas mujeres violadas que abortaron y están en la cárcel o campesinos obligados a sembrar enervantes, mientras los responsables se encuentran libres.
Interrogado sobre si continuará dando clases, respondió que sí, los fines de semana, pero sin cobrar y que piensa hacerlo en la UAQ y en el Tecnológico Regional si lo invitan, para no encerrarse en la burbuja del Senado y de la Ciudad de México. El contacto con los jóvenes es fundamental, aseguró.
Insistió en que los mexicanos, no solamente los legisladores, deben defender la educación y la salud pública, evocando que en el pasado las mejores universidades y hospitales eran públicos y eso se ha ido perdiendo.
Le preguntaron cuánto tiempo más permanecerá en el Senado, en virtud de haber sido nombrado delegado de programas federales y contestó que le dirá pronto, que hoy esta trabajando de tiempo completo en el cargo para el que fue electo.
¿Qué pueden esperar los queretanos de su desempeño? Se le interrogó también.
-Yo creo que no solamente de mi representación, sino de todos los senadores del país, que busquemos una nueva cultura política. Hicimos una cultura en la que aceptábamos estos abusos sin decir nada, un cultura cercana a esta herencia española de los duques, barones y demás, que aplicaba para que los senadores pudieran tener séquito de ayudantes. Hoy entendemos que estamos para servir, no para servirnos. Insistió en que no debe haber exceso en los ingresos.Insistió en que deben aumentarse los recursos para la educación superior y para el apoyo a la gente mayor.
Finalmente dijo: Vamos a pelear ese tema también. Me va a tocar. Para convencer. Que cuente con ello no solamente la UAQ sino toda la educación pública.
POR: FERNANDO VENEGAS RAMÍREZ