lunes, enero 18, 2021
Sin Resultado
View All Result
Plaza de Armas | Querétaro
  • Andadores
  • aQROpolis
  • Editoriales
  • Efectivo
  • En tiempo real
  • Local
  • México
  • Planeta
  • Ráfagas
  • Roja
  • Andadores
  • aQROpolis
  • Editoriales
  • Efectivo
  • En tiempo real
  • Local
  • México
  • Planeta
  • Ráfagas
  • Roja
Sin Resultado
View All Result
Plaza de Armas | Querétaro
Sin Resultado
View All Result

Los moderados se volvieron locos

ESTRICTAMENTE PERSONAL

por Raymundo Riva Palacio
23 septiembre, 2020
en Editoriales
El reguilete de Lozoya

En las últimas semanas, dos de los secreta­rios moderados en el gabinete del presi­dente de Andrés Manuel López Obrador, han incurrido en decisiones controver­siales e inexplicables, que en las luchas palaciegas de poder les restan poder en lugar de fortalecer­los. En la resbaladilla llena de jabón se encuen­tran Esteban Moctezuma y Marcelo Ebrard. El primero, secretario de Educación, acaba de me­terse en un problema; el segundo, secretario de Relaciones Exteriores, está tratando de salir del suyo sin demasiadas heridas públicas.

Moctezuma, un funcionario que públicamen­te parece gris pero que siempre ha sido duro, aca­ba de dar un golpe de timón extraordinariamente osado, y de forma discreta le quitó prácticamen­te todo el poder a los subsecretarios de Educa­ción. Oculto tras las recientes medidas de aus­teridad del gobierno y el recorte de los gastos de operación, Moctezuma publicó un nuevo regla­mento interno de la Secretaría en donde creó nuevas secretarías generales, sumadas a las ya existentes, la mayoría de ellas dependiendo de él directamente.

Presupuestalmente, se puede pensar median­te ese tipo de acción que redujo gastos, que es lo único que ve la Secretaría de Hacienda y el Presidente, pero en el reacomodo incluyó ade­cuaciones a varios artículos normativos de la Se­cretaría. El más importante es el 52, dentro del Capítulo XI de la suplencia de los servidores pú­blicos, donde se establecía que en caso de ausen­cia del titular, sería suplido, en este orden, por los subsecretarios de Planeación, Evaluación y Coordinación, de Educación Superior, de Edu­cación Media Superior, de Educación Básica o por el Oficial Mayor.

La modificación que hizo Moctezuma esta­blece ahora que en el artículo 53 del Capítulo VI de la suplencia de los servidores públicos de la Secretaría, “la persona titular será suplida en sus ausencias por las personas titulares de la Je­fatura de la Oficina del Secretario, de la Unidad de Actualización Normativa, Legalidad y Regu­lación, de la Unidad de Promoción de Equidad y Excelencia Educativa, de la Unidad de Admi­nistración de Administración y Finanzas” y des­pués de ellos, por los subsecretarios, excluyendo al Oficial Mayor.

De esta manera, Moctezuma se sacudió a los subsecretarios que le impuso López Obrador, y les restó poder, dejándolos en el rango de je­rarquías por debajo de sus consejeros y jefes de Unidad, que son cargos que colocó sin injeren­cia presidencial. En el reacomodo financiero de la Secretaría, aprovechó para cambiar la corre­lación de fuerzas y construir una muralla en tor­no a él, hasta que el Presidente se dé cuenta de lo que hizo y empiece a dar explicaciones, o rectifi­caciones, como le sucedió a Ebrard.

La semana pasada brincó a la opinión públi­ca la conclusión de una acción arbitraria que ha­bía tomado el canciller a principio de septiem­bre, cuando nombró “embajadora emérita” a la representante de México ante la Organización de Estados Americanos, Luz Elena Baños Ri­vas. Baños Rivas es una diplomática de carrera, cuya nominación el año pasado como represen­tante en la OEA no generó oposición. El proble­ma surgió cuando hizo el nombramiento Ebrard, que provocó indignación en el Servicio Exterior Mexicano por una razón inexplicable que llevó al canciller a cometer el monumental error al de­signarla “embajadora emérita”, en violación de la Ley del Servicio Exterior, que les requiere te­ner al menos 10 años de trabajo distinguido co­mo embajador o embajadora de escalafón, algo que Baños Rivas no tenía. Apenas en 2018 fue ascendida escalafonariamente a embajadora.

Las presiones internas de los miembros del Servicio Exterior Mexicano se multiplicaron y rápidamente lo socializaron al enterarse del nombramiento de Baños Rivas, enviando co­rreos electrónicos a varios periodistas, para tras­ladar un asunto intramuros a la arena pública, y ejercer presión de esa manera –porque Ebrard ignoró los reclamos-, para que se revirtiera la designación. La noticia no se hizo pública, pero el viernes la difundió en sus artículos periodís­ticos Jorge G. Castañeda, ex secretario de Rela­ciones Exteriores, quien definió como un “oso bananero” el tropiezo de Ebrard. “El canciller se habría quejado con su equipo de que no lo cui­daron de esta metida de pata, a él ‘que anda en veinte pistas’,” escribió Castañeda. “Tal vez de­bería concentrarse en una: la Secretaría de Re­laciones Exteriores”.

El súper secretario de Estado patinó con Ba­ños Rivas de una manera incomprensible. Fra­casó también en cumplirle al Presidente su de­seo para que Jesús Seade consiguiera la titula­ridad de la Organización Mundial de Comercio, por algo que quizás López Obrador no sabe: no hizo el cabildeo extraordinario que requería –un latinoamericano que remplazara a otro latino­americano en el cargo, no era algo fácil de con­seguir-, quizás porque la Casa Blanca no quería que fuera Seade quien se quedara con el puesto.

No ha jugado claro Ebrard con López Obra­dor, como tampoco Moctezuma le está siendo leal al Presidente, quien colocó en la Subsecre­taría de Educación Superior a Luciano Conchei­ro, como la persona con quien realmente vería los asuntos educativos en Palacio Nacional, y a quien el secretario ha buscado cómo neutralizar­lo y deshacerse de él. Como no puede despedirlo, lo minimiza en responsabilidad. Como el Presi­dente no entiende de política exterior, Ebrard le coló una embajadora emérita.

Moctezuma y Ebrard traen la cabeza calien­te, y están jugando a la politiquería, como defi­ne López Obrador la grilla. Ambos son parte del grupo de moderados en el gabinete y el gobierno, que es una corriente que ha ido perdiendo capa­cidad de acción e influencia en el Presidente, que se ha corrido al ala de los radicales. Sorprenden los yerros de los secretarios, que se cuentan en­tre los más capaces y experimentados en un ga­binete de bisoñas y gerontocráticos, quienes al querer pasarse de listos, perdieron espacio, co­mo sucede con Ebrard, sometido a un intenso golpeteo en los últimos días, o se coloca en ries­go ante el Presidente, como Moctezuma. La re­cuperación ahora les será más difícil al haber re­galado armas a sus enemigos.

[email protected]

twitter: @rivapa

Comentarios

Comentarios

Etiquetas: ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOREsteban MoctezumaMARCELO EBRARD
Raymundo Riva Palacio

Raymundo Riva Palacio

Artículos Relacionados

RAFAEL CARDONA / AMAGOS, SEÑALAMIENTO Y POLARIZACIÓN

La conjura de los ineptos

por Rafael Cardona
22 diciembre, 2020
Raymundo Riva Palacio / La renuncia de Romo (2ª. Parte)

Qué le importa a López Obrador

por Raymundo Riva Palacio
17 diciembre, 2020

Invitarán a AMLO para inaugurar el nuevo Hospital

11 diciembre, 2020
Raymundo Riva Palacio / La renuncia de Romo (2ª. Parte)

La pelea de los egos

por Raymundo Riva Palacio
9 diciembre, 2020
Siguiente publicación
Querétaro mantiene su semáforo naranja

Inicia el proceso electoral de la UAQ

Plaza de Armas | Querétaro

Categorías

  • Andadores
  • aQROpolis
  • Cartón
  • Editoriales
  • Efectivo
  • En tiempo real
  • Fuego amigo
  • Fuente de El Marqués
  • Local
  • México
  • Planeta
  • Portada
  • Ráfagas
  • Roja
  • Aviso de Privacidad
  • Aviso Legal
  • Contacto

© 2020 MEDIOS AQRÓPOLIS S.A. DE C.V. Todos los derechos reservados.

Sin Resultado
View All Result
  • Andadores
  • aQROpolis
  • Editoriales
  • Efectivo
  • En tiempo real
  • Local
  • México
  • Planeta
  • Ráfagas
  • Roja

© 2020 MEDIOS AQRÓPOLIS S.A. DE C.V. Todos los derechos reservados.

Este sitio web utiliza cookies. Al continuar utilizando este sitio web, usted está dando su consentimiento para el uso de cookies. Visite nuestra Política de privacidad y cookies.