COLUMNA PLAZA DE ARMAS
La conexión chiapaneca AMLO-Peña
¡Al pie del cañón!: Sabino
- Ya ven priistas a Hugo Cabrera para el 21
- Necesitará PAN votos opositores en la LIX
- Ratifican a Diego como director del INAH
- Prepara Gilberto la encomienda de AMLO
POR: SERGIO ARTURO VENEGAS RAMÍREZ
República amorosa.
Manuel Velasco Coello, el hoy presidente de la Conago, participaba decidido en el proyecto de José Antonio Meade en la alianza PRI-Verde que le permitió ser gobernador de Chiapas, cuando recibió una señal ancestral, la de su abuelo materno Fernando Coello Pedrero, para apoyar a Andrés Manuel López Obrador.
Lo vinimos a saber el 29 de abril de este año, cuando el viejo patriarca informó que el mandatario chiapaneco, su nieto, respaldaba “totalmente” la candidatura presidencial de Morena, a pesar de pertenecer al Verde, según publicó el Milenio.
Para complementar esta información, el periódico dirigido por Carlos Marín publicó una fotografía de Jorge Carballo en la que se ve al abuelo de Velasco Coello acompañando al ExPeje en su gira por Chiapas y Tabasco.
“Mi nieto es amigo de Andrés y la simpatía también que me tiene mi nieto, también la tiene con Andrés de muchos años”.
El viejo Fernando Coello Pedrero tenía razón.
Manuel Velasco Coello convirtió la amistad y la simpatía en algo más, no solamente como un operador que rompió la alianza del PRI y PVEM en su estado, lo que al final hizo ganar a Morena la gubernatura, sino en un enlace entre López Obrador y Peña Nieto.
A ver, a ver, ¡¿cómo está eso?!
Una fuente muy bien informada compartió con este armero que a partir de los consejos del abuelo, el joven mandatario alentó y participó en los entendimientos secretos que permitieron un primero de julio más tranquilo que un domingo en la Alameda.
Habría hablado el joven Velasco con su amigo Peña, me cuentan, para ofrecerle un acuerdo civilizado: Andrés Manuel López Obrador bajaría el tono de sus discursos en contra suya –como vimos- a cambio de que se garantizara un proceso limpio y se reconociera sin reparos su triunfo, tan cantado por las encuestas que, ahora sí, le atinaron.
A partir de ahí y quién sabe con qué información, el abanderado del Partido Acción Nacional, Ricardo Anaya Cortés, habló de un pacto López Obrador y Peña Nieto para la entrega de la Presidencia de la República.
Así, mientras el queretano amenazaba con investigar y encarcelar a Peña Nieto en respuesta por, decía, la utilización del la PGR en su contra, el candidato de Morena ofrecía amor y paz y aseguraba que no habría persecuciones ni venganzas.
Por cierto.
Aquí mismo, al reunirse con empresarios en Juriquilla el 11 de marzo, AMLO fijó su posición y dijo “El presidente Peña está más desacreditado que el PRI o mejor, que el PRIAN y por eso Anaya piensa que gana puntos diciendo que lo va a meter a la cárcel. Eso es imposible, pura demagogia. Un presidente sólo puede ser enjuiciado por traición a la patria. Así se estableció desde la Constitución de 1857 y fue confirmado aquí en la de 1917 para sostener el régimen presidencialista”. (PLAZA DE ARMAS, 12 de marzo de 2018).
Que él sí propondría un cambio al 108 constitucional para que un presidente en funciones pueda ser enjuiciado por corrupción, porque ahorita no es posible.
Volvería sobre el tema en la sesión de preguntas y respuestas, en donde una mujer que identificada solamente como Ana Laura le preguntó si es cierto el rumor de que ya pactó con Peña para que lo deje ganar.
-Yo no he dicho ni diré que lo meteré a la cárcel. No quiero la confrontación. Ya padecimos a un presidente antidemocrático y autoritario, Vicente Fox, que llegó por la vía democrática y luego la canceló. Nos hizo mucho daño, porque un presidente si se lo propone puede hacer y mucho. A mi lo que me interesa es sacar adelante al país. Lo que queremos es que se respete el voto. Y no vamos a pactar con nadie, que eso quede claro.
Insistió en que no es cierto que Anaya vaya a meter a la cárcel a Peña. Son parte de lo mismo y siempre se ponen de acuerdo, pero se llevan fuerte y yo los estoy llamando a que se serenen. El problema es que el candidato del PAN, el de los moches, se les salió del huacal. Antes no salía de Los Pinos.
El tema de la lucha contra la corrupción dominó la presentación de AMLO, sobre todo cuando un grupo de mujeres señaló que en Querétaro hay grandes corruptelas y que desde octubre denunciaron ante la fiscalía estatal los negocios del candidato presidencial del PAN y no les hicieron caso. “Eso va a cambiar” respondió El Peje.
Había efectivamente, comenta mi informante de alto nivel, cuyo nombre me reservo, un acuerdo de respeto recíproco, como lo estamos viendo, entre el mandatario saliente y su posible sucesor, puntero en la contienda presidencial desde el principio.
Fernando Coello Trejo, el abuelo de Manuel Velasco Coello, antiguo y querido amigo de Andrés Manuel López Obrador, fue la conexión chiapaneca para una transición pacífica, sin tigres ni diablos.
Así de fácil.
Así de difícil.
-OÍDO EN EL 1810-
Madrugadores.
Que reunido la semana pasada con colaboradores para agradecerles su participación en la campaña de Pepe Meade, el coordinador estatal Hugo Cabrera Ruiz fue interrumpido por uno de ellos para decirle que él (HCR) es “nuestro hombre para el 21”.
Y es que el aún diputado federal y próximo local pluri fue uno de los pocos sobrevivientes del tsunami.
¡Hugol!
-¡PREEEPAREN!-
La 59.
Me comentan que esa nueva mayoría opositora de 13 diputados contra 12 del PAN-Gobierno es frágil y puede romperse con un solo voto para iniciativas generales y otros más para reformas constitucionales.
Sí, eso está claro.
El hecho es que el Instituto Electoral del Estado de Querétaro, presidido por Gerardo Romero Altamirano asignó a Acción Nacional solo dos de las 10 pluris, que con las ganadas por mayoría (10) no le alcanza para conservar el número mágico de 13 que tiene en la actual legislatura, por cierto una de las peores por su docilidad y acuerdos.
En la próxima, la LIX, los panistas buscarán los votos del PRI, Morena, Querétaro Independiente y Verde Ecologista. Ya veremos cómo actúan unos y otros en los asuntos de interés de los queretanos.
Estaremos pendientes.
-¡AAAPUNTEN!-
Acierto.
Adelantó este domingo el periódico Reforma la ratificación de Diego Prieto como director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia por parte de la futura secretaria de Cultura, Alejandra Frausto
Diego, muy ligado a Querétaro en donde fue inflexible delegado del INAH por más de 10 años y ha seguido pendiente de su cuidado, sobre todo ahora que el alcalde vendedor quiere modificar el Plan Parcial de Desarrollo, es un gran antropólogo y ejemplar servidor público.
Doy fe.
-¡FUEGO!-
Tranquilo.
Con la discreción y seriedad que le caracterizan, Gilberto Herrera Ruiz trabaja en la encomienda de Andrés Manuel López Obrador como coordinador estatal de programas federales de desarrollo y guarda silencio ante las puyas y descalificaciones. Nada responde al futuro diputado federal Felifer Macías que dice que presidente electo está nombrando a sus “amiguitos” ni a Michel Torres, dirigente del PAN, que califica el proyecto como atentado al federalismo, y menos todavía al desbordado jefe de ellos que dice que el ex rector debe buscarlo a él.
¡Porca miseria!