SERGIO VENEGAS RAMÍREZ
A pesar de que desde un inicio de las investigaciones se dijo que no había videos ni mayores datos de quienes lanzaron bombas molotov a la Carreta del Pacífico, el fiscal del Estado, Alejandro Echeverría Cornejo afirmó que fueron dos personas quienes realizaron la acción criminal y “los dos involucrados fueron localizados muertos al interior de la camioneta” que utilizaron el 5 de julio.
Según reportes del funcionario, fue hace 15 días cuando se localizaron los cuerpos de estas personas, originarias de Guanajuato.
“Desafortunadamente -dijo- los responsables no van a poder ser detenidos, (pues) nosotros los identificamos en el estado de Guanajuato, (eran) originarios de la ciudad de Irapuato”, detalló.
Cabe destacar que ese hecho, es su momento, fue atribuido por las propias autoridades a una de las organizaciones criminales con mayor presencia en el país y que ya ha dado señales de tener presencia en nuestra entidad.
El incendio de la marisquería fue retomado ayer por el Fiscal tras el siniestro suscitado en el ‘table dance’ El Caballo Blanco, en Coatzacoalcos, Veracruz, que ha cobrado la vida de una treintena de personas y cuyo modos operandi fue similar al de el restaurante queretano.
Dijo Echeverría Cornejo que hace dos semanas, agentes ministeriales fueron comisionados para trasladarse a Irapuato, Guanajuato, donde confirmaron la muerte de las dos personas en la misma camioneta en la que escaparon.
Detalló que fue la propia familia de los presuntos responsables, quienes los reconocieron y aceptaron que había cometido el delito en el municipio de Corregidora.
LA CARRETA DE SOSPECHAS Y PROBLEMAS
En julio de 2016, se reveló que la matriz del restaurante La Carreta del Pacífico, ubicada en Tláhuac, servía como centro de operaciones al Cártel de Tláhuac, liderato por Felipe de Jesús Pérez, conocido como “El Ojos”, quien a la postre moriría en un enfrentamiento con fuerzas federales en el patio de una casa de seguridad en esa delegación de la Ciudad de México.
Además, las investigaciones arrojaron que el dueño del restaurante, que para esas fechas ya contaba con dos exitosas sucursales en Querétaro (Milenio y El Pueblito), era el mismo delegado de Tláhuac, Rigoberto Salgado.
De hecho, según investigaciones oficiales, los inmuebles de Querétaro ubicados en Camino Real de Carretas 312, colonia Milenio Tercera Sección y en Josefa Ortiz de Domínguez 121 esquina Constituyentes, colonia El Pueblito, eran administrados por Jazmín Rodríguez Salgado, sobrina del entonces delegado.
Cuando se supo de los vínculos de Salgado con el cártel de Tláhuac y su operación comercial en Querétaro, el gobernador Francisco Domínguez Servién ordenó cerrar ambos negocios.
Así, el 4 de agosto de 2017, “por no contar con las condiciones y medidas de seguridad necesarias para operar, carecer de la autorización de Protección Civil, no tener licencia de alcoholes y emplear a elementos de seguridad bajo la influencia de la marihuana”, ambas marisquerías fueron clausuradas de manera indefinida.
En los operativos de clausura, participaron con un fuerte despliegue las secretarías estatales de Gobierno, Seguridad Ciudadana y Salud, con el apoyo de las fuerzas policiales de los municipios de Querétaro y de Corregidora, los cuales operan bajo el nombre comercial de Mariscos la Carreta del Pacífico. La inspección finalizó a las 16:45 horas.
REAPERTURA Y QUEMAZÓN
La Carreta del Pacífico de El Pueblito reabrió sus puertas diez días antes de que fuera incendiada con bombas molotov.
En redes sociales, se anunciaba la inminente reapertura que finalmente se llevó a cabo el lunes 24 de junio.
Pero no duró ni dos semanas en pie. La tarde del viernes 5 de julio, la palapa principal ardió rápidamente, luego de que desde la calle lanzaran al menos dos bombas molotov.
En ese momento, las autoridades aseguraron que la cámara de seguridad no funcionaba y que no contaban con información de los responsables.
Hoy el fiscal Echeverría dice lo contrario y afirma que los autores materiales murieron calcinados.
VOLVEREMOS: LA CARRETA
Diez días después del incendio, mediante un comunicado, la empresa Servicios Gastronómicos La Carreta del Pacífico S. A. DE C.V., se deslindó de las presuntas actividades delictivas con las que se ha vinculado a Rigoberto Salgado, delegado de Tláhuac a quien se le relaciona con una organización criminal.
Al hablar de la inseguridad y violencia que priva en el territorio nacional, los empresarios acusaron que personas sin escrúpulos y con motivaciones políticas, “pretenden vincular a empresas legalmente establecidas, con conductas delictivas, lo cual rechazamos tajantemente”.
En la misiva, dijeron no tener parte en la cruenta disputa partidista y señalan que han sido víctimas de clausuras injustificadas. Advirtieron que los señalamientos que se han hecho por parte de las autoridades, serán contrarrestados con acciones legales “Pues contamos con toda la documentación en regla”.
Al dirigirse a su clientela, les exhortaron a ser pacientes; A los medios de comunicación y a la opinión pública en general, presunción de inocencia y a las autoridades, respeto al derecho al trabajo.
Sobre sus restaurantes, en el boletín de prensa señalaron que iniciaron en un modesto local en Querétaro, apoyados por un chef de renombre que les diseño el menú y les contactó con los proveedores del mejor marisco nacional.
Añadieron que con el crédito de su trabajo, pudieron ir extendiendo su presencia en la entidad “El buen crédito de nuestro servicio, nos impulsó a abrir un tercer local en la Ciudad de México, cuyos resultados fueron idénticos a los dos primeros”.
Finalmente pidieron a las autoridades las condiciones mínimas para volver a trabajar y reabrir el lugar.