Para Juan Martín Granados Torres –el jefe del gabinete- negó que Querétaro sea inseguro y reconoció la errónea política de comunicación del gobierno estatal: “Estamos tratando de afinar nuestros mecanismos de comunicación social, que no han sido suficientemente explícitos, claros, pero tampoco lo suficientemente pertinentes y oportunos”. Eso dijo en el noticiario de RR Noticias, conducido por Edgar Pliego, a propósito de la escalada de hechos delictivos que golpean a la sociedad queretana y también a la credibilidad de la administración de Francisco Domínguez.
Aceptó que los hechos son incontestables, son evidentes, pero tienen una explicación y una narrativa de lo que están haciendo en el gobierno del estado y los municipales.
Sin embargo desestimó que estén fallando, que no están rebasados y tienen un control aceptable. Hay, dijo, una estrategia clara que tiene que ver con el fortalecimiento de los cuerpos policiales, la depuración, la prevención y el combate a la corrupción.
En su opinión, ha fallado la comunicación para que la ciudadanía sepa qué están haciendo y qué pasa cuando suceden estos picos de alerta por hechos violentos.
Recomendó separa los hechos del sábado en particular, que afectaron a una familia muy conocida y estimada. Fue, apuntó, una agresión directa, planificada por quienes venían a hacerle un daño tanto en lo patrimonial como en lo personal.
Existen avances en la investigación. Por lo que ve al caso de Peñuelas, en donde fueron asesinadas otras dos personas, hay identificación de los responsables y están en su búsqueda.
No es cierto ni se puede decir que Querétaro es inseguro. En Guanajuato hay disputas y matanzas entre grupos delictivos. Aquí sigue llegando gente de otros lados, lo mismo que las inversiones y más de una calificadora ha puesto a Querétaro como el mejor destino para invertir en los próximos años.
Hay control aceptable de seguridad, insistió. Hay, deslizó, robos simples, homicidios en riñas. Sólo en 10% son de mecánica similar a los de la delincuencia organizada. “Aquí no hay complicidad de la policía con los delincuentes. Se atienden todas las denuncias al 911”.
Tuvimos, argumentó Granados Torres un pico en este esquema de violencia generalizado en el país. Nosotros, en Querétaro, con un menos cuatro por ciento en comparación al trimestre anterior. Estamos ajustando las acciones operativas, porque el gobierno federal está generando cambio de mandos. Es un periodo de transición.
Recordó que la delincuencia de Guanajuato enfrenta luchas por el poder de control en municipios cercanos a Querétaro y que los delincuentes que vienen a refugiarse bajan sus esquemas de protección.
Hay capacidad para responder, pero se pondrá mayor atención porque está llegando gente que compra casas y renta vehículos. Operan en efectivo. “Vamos a sacar una campaña para defender a nuestra entidad frente a la ola de violencia que azota a la región y al país. Que nos reporten anónimamente para verificar”.
Finalmente señaló el secretario de Gobierno que la seguridad es un bien público, en el que juega el tema de integridad.
En relación a las críticas, comentó que si se afirma algo, la responsabilidad debe ser con evidencia. De ética personal y que ellos van a apostar a los chats, a trabajar con los ciudadanos. A un diálogo directo, franco
POR: FERNANDO VENEGAS RAMÍREZ