EL JICOTE
Después del trabajo informal, que ha sido golpeado en forma despiadada y descomunal, el turismo es el sector de la economía que más daños ha sufrido con ese perverso paquetito envuelto en grasa llamado Corona Virus. Según datos divulgados el turismo genera 8.7% del PIB y 4 millones de empleos, entre los directos y los indirectos. Consta de 454,000 pequeñas empresas. Es el mayor generador de oportunidades laborales para las mujeres en el sector privado y un foco de crecimiento que reduce la marginalidad en las comunidades donde trabaja.
La crisis del turismo ha arrastrado a otras empresas como, por ejemplo, la aviación. Hasta el momento no se conoce un plan de apoyo al sector frente a la crisis del Corona virus. Ni siquiera en declaraciones, el Secretario de Turismo está, junto con Romo y otros funcionarios, en calidad de desaparecidos. Pero en virtud de que no se mueve una sola hoja del árbol de la política pública sin la anuencia del Presidente, para evitar que los desmienta ni se aparecen ni nadie los busca.
El Presidente ha presentado el ensayo: “La Nueva Política Económica en Tiempos de Corona Virus”, Causa horror y estupefacción la serie de mentiras que dice El Presidente, evoca su cumplimiento al Estado de Derecho, cuando lo que ha demostrado es precisamente su falta de respeto a la Constitución que juró cumplir y hacer cumplir. Pronto se le olvidó cuando con un memorándum quiso cambiar una reforma constitucional o cuando con esperpénticas decisiones cambio leyes a su gusto y medida. Tres ejemplos, las designaciones del Fondo de Cultura Económica y la CNDH¸ las hizo atropellando leyes y reglamentos internos de las dos instituciones; la Ley Bonilla que ampliaba el término de la gubernatura de su amigo y que apoyó con la Secretaria de Gobernación, Gracias a la decisión y valentía de la Suprema Corte que unánimemente se echó abajo la afrenta constitucional. De exasperante cinismo la afirmación que ha respetado la división de poderes, cuando hace apenas unos días la oposición y hasta diputados de Morena, batearon las posibilidades de restarles facultades a los diputados en el manejo del presupuesto.
Resulta hasta divertido que su diagnóstico contra el neoliberalismo lo apoye con gráficas de instituciones públicas a las que siempre ha desmentido. Con la desgracia, según los especialistas en estadísticas, que la gráfica en la que supuestamente prueba que la desigualdad creció en lo que llama período neoliberal, demuestra precisamente lo contrario. (Reforma 17 de mayo). Con estridencia reiterativa afirma; “La sociedad debe participar de manera activa en los asuntos nacionales”. ¡Qué curioso! Nadie sabe que para la redacción de este documento tan importante haya invitado a nadie. Comparto la sugerencia, no solamente de líderes de opinión sino hasta de miembros de su partido, para que el Presidente, en un ejercicio incluyente convoque a un acuerdo nacional a gobernadores, empresarios y líderes sociales. Lo veo casi imposible, Robinson Crusoe y el Llanero Solitario, eran “socialités”, ante López Obrador que todo lo hace “solititito”. Al cabo que, como él dice, “gobernar es fácil”.