Continuando con el análisis situacional del sector salud en Querétaro, Gilberto Herrera Ruiz y Beatriz Robles Gutiérrez, candidatos federales de la coalición “Juntos Haremos Historia” por el Senado y la diputación del Distrito 3, respectivamente, se reunieron con personal de enfermería para intercambiar puntos de vista sobre las problemáticas y necesidades que los aquejan.
En este encuentro, el candidato Herrera Ruiz partió de reconocer que en México la mayoría de quienes se dedican a esta profesión son mujeres (85 de 100) y señaló que como país se tiene un importante déficit en recursos humanos en el área, pues sólo hay alrededor de cuatro enfermeras para la atención de cada mil habitantes, cuando son nueve el promedio de los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). “Sabemos que hay una sobre carga de trabajo para ustedes y es muy delicada la situación local porque somos uno de los tres estados con más rezago en ese sentido, pues en Querétaro no llegamos a ni a tres enfermeras para cada mil personas, es decir, ni la tercera parte de la OCDE; aunado al déficit de camas en servicio que hay disponibles para la gran demanda que tiene la población”, externó. Al respecto, personal de distintas instituciones públicas refirieron las diversas problemáticas laborales a las que se enfrentan, las cuales van desde trabajar en condiciones de alto riesgo sin los insumos suficientes, hasta el hecho de que sus salarios no corresponden al tipo de actividades ni a las prolongadas jornadas que desarrollan, así como a la situación de inseguridad que hay alrededor de sus clínicas y hospitales.
“Parece que en el sector público de Querétaro hay enfermeras de primera, de segunda y de tercera, no puede ser que nuestras condiciones laborales sean tan desiguales. Además, estamos rebasadas y las autoridades no entienden que en nosotras recae la responsabilidad del servicio de salud”, señaló una enfermera con más de 20 años de experiencia profesional.
En su momento, el Dr. Sergio Blanca Álvarez, exdelegado del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) puntualizó que “no se trata de demagogia, en verdad es pertinente homologar los sueldos de los tres sistemas de salud públicos más importantes, de acuerdo con una proyección conjunta con la Secretaría de Hacienda. Esto es un aspecto que impactaría en todo lo referente al servicio de salud”.
En este sentido, una enfermera que se desempeña como jefe de servicio en quirófano reportó “una gran rotación de personal que va y viene de los hospitales públicos a los privados, buscando completar sus ingresos porque muchas somos jefas de familia”.
Sobre ese tema, Gilberto Herrera puntualizó que Querétaro es uno de los estados en los que la inversión privada es mayor que el gasto gubernamental en salud y preguntó a las especialistas “¿el servicio es mejor que el público? Porque aquí el riesgo es que con la salud pase lo mismo que ocurre con la educación, de que abran clínicas y hospitales sin dar una atención de calidad”.
Otra enfermera consideró que “es un negocio tener al tercer mundo enfermo. Aquí quien tiene el recurso económico puede acceder a la salud, pero ¿qué pasa con la gente que apenas tiene el dinero para subsistir?, el día que enferma queda vulnerable, es una desigualdad tremenda y eso es lo que nos duele como país. Por eso necesitamos a gente con conocimiento y congruencia para que lleve nuestra voz a los espacios donde se toman las decisiones que pueden cambiar esta situación”.
Por su parte, Beatriz Robles, candidata a la diputación federal por el Distrito 3, expresó que “para nosotros está siendo muy importante esta cercanía con los expertos de los diferentes sectores. Los gobiernos deciden sin tomarlos en cuenta, ahí está el tema del aeropuerto costosísimo cuando sólo el nueve por ciento de los mexicanos se transportan en avión. Ese dinero se podría invertir en la creación de cien hospitales de primer nivel, cada uno con una inversión de mil 800 millones de pesos”.
Finalmente, el personal de enfermería expresó que “tenemos que ser más críticos, nos interesa que la gente que llegue a esos cargos tenga los conocimientos y la empatía. Es una indolencia tirar tanto dinero a la basura en el proceso electoral cuando hay tantas necesidades y que todavía digan que lo gastan porque ya estaba etiquetado, eso es inaceptable”.
POR: REDACCIÓN