TABLERO
Fracasa intromisión oficial en la UAQ
- Sería Teresa García la segunda rectora
- La gira de AMLO el 8 y 9 de noviembre
- Bajaron a Lupe García para El Marqués
- Pide Braulio cancelar comisión bancaria
POR: SERGIO ARTURO VENEGAS ALARCÓN
La tentación.
Desde hace 60 años, casi todos los gobernadores han querido decidir en la Universidad Autónoma de Querétaro, empezando por Juan C. Gorráez que pretendio tirar al primer rector, Fernando Díaz Ramírez, hasta Francisco Domínguez que fracasó esta semana en su intento de imponer a Arturo Castañeda Olalde y ayer mismo proclamó urbi et orbi el triunfo de Teresa García Gasca.
Revisemos la historia.
En 1958 el mandatario estatal nombró a José Alcocer Pozo como segundo rector pero nunca pudo tomar posesión porque la comunidad estudiantil, encabezada por Álvaro Arreola Valdez, se rebeló y no solamente sostuvo al fundador sino que ganó la autonomía, esa que los universitarios defienden apasionadamente, como hoy.
Entre un hecho y el otro median seis décadas, pero los políticos no aprenden y -mal asesorados y peor operados- se sienten dueño de la UAQ y con facultades extraconstitucionales para nombrar a sus autoridades. El único que lo logró fue su creador: Octavio S. Mondragón, antes de la autonomía.
De allá para acá nadie, si bien Antonio Calzada Urquiza, Mariano Palacios Alcocer y Enrique Burgos García pudieron, sin duda, influir en los procesos internos gracias a sus magníficas relaciones con la Alma Mater.
El arquitecto Calzada se opuso en 1976 a la elección de Álvaro Arreola Valdez e impulsó la llegada del recientemente fallecido Enrique Rabell Fernández, como quedó acreditado en las entrevistas que ambos concedieron a este reportero para la serie Queretanidad, de PLAZA DE ARMAS. Mariano Palacios Alcocer dejó la rectoría para regresar a la política partidaria en 1982 y lo sucedió su secretario académico Braulio Guerra Malo. Con Enrique Burgos García, en 1994, fue electo Alfredo Zepeda Garrido, vinculado al gobernador.
En los tres casos fueron tersos los relevos.
No fue así en otros relevos universitarios ni tan armónica la relación con el gobierno.
Manuel González Cosío tuvo cuatro rectores: batalló con Fernando Díaz Ramírez que se retiró en 1964, seguido de Alberto Macedo Rivas, Hugo Gutiérrez Vega y Enrique Rabell Trejo. Rafael Camacho Guzmán enfrentó el movimiento de mayo de 1980, siendo Mariano Palacios Alcocer el jefe universitario. Ignacio Loyola Vera chocó con la primera rectora, Dolores Cabrera Muñoz y Pancho Dominguez con Gilberto Herrera Ruiz, rector 16, el único que ha rendido un informe en nuestra Plaza de Armas, frente a Palacio.
Sesenta años los contemplan. Gobernadores con la tentación de manejar la UAQ como su escuela.
Sorprende, sí, el caso del actual mandatario, egresado de Veterinaria. Ni Ignacio Loyola ni José Calzada (que la llevó muy bien) egresaron de la máxima casa de estudios queretana. Él sí, igual que su secretario de Gobierno y el de Educación, entre otros miembros del gabinete estatal.
No ha apoyado a su Alma Mater. Le ha regateado los recursos. Ha criticado groseramente al rector y pretendió ponerle sucesor. Y para colmo ayer, sin el menor cuidado, salió a anunciar el triunfo y supuesto acuerdo García-Castañeda.
En seis décadas de historia autónoma, la UAQ ha sufrido estas relaciones peligrosas.
En 1958 con el primer movimiento estudiantil para reponer a Fernando Díaz, luego de que Juan C. Gorráez lo destituyó y nombró al doctor José Alcocer Pozo, por cierto padre del actual secretario de Finanzas del Estado, Manuel Alcocer Gamba. Que chiquito es el mundo y más Querétaro.
Ahora, en 2017, el gobierno de Domínguez -con sus Botellos y Granados- falla en la intentona de poner a Arturo Castañeda y al no poder, dan madruguete sobre el triunfo de Teresa García Gasca.
Los universitarios deciden.
A pesar de los gobernantes y sus tentaciones.
-BLANCAS Y NEGRAS-
Fortalecido.
Muy satisfecho debe estar Gilberto Herrera Ruiz, rector de la Universidad Autónoma de Querétaro, por el resultado de la elección de este viernes, con el triunfo inobjetable de la directora de Ciencias Naturales, Teresa García Gasca, que ganó a pesar de la intromisión del gobierno estatal con un candidato denostador a su desempeño. De alguna manera esto fue una especie de plebiscito a su gestión. Y la comunidad universitaria se expresó.
Varios funcionarios públicos quedaron en entredicho por entrometerse en el proceso universitario. No extraña lo de los titulares de las secretarías de Gobierno, Educación y Desarrollo Social, pero sí sorprende que la directora del Instituto de la Mujer trabajara a favor del otro género, habiendo dos candidatas.
Seis municipios de Querétaro recorrerá el dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador, en su gira del 8 y 9 de noviembre. El también aspirante presidencial estará el primer día en Tequisquiapan, Ezequiel Montes y Colón. El segundo en Tolimán, Pinal de Amoles y Jalpan. Tiene la mira en nuestro estado.
Por tener dos amores -PAN y Morena- se le cayó la candidatura al ex diputado federal Lupe García para la presidencia municipal de El Marqués. A la pregunta de PLAZA DE ARMAS “¿si ya saben cómo se pone pa’ que lo invitan?”, el líder estatal Carlos Peñafiel respondió “yo no lo invité”. Y, bueno, no descarte a Jorge Lomelí Noriega como la carta para ese ayuntamiento.
En el Partido Revolucionario Institucional ni se inmutan ante la posibilidad de que Mario Calzada Mercado, muy buen presidente municipal, busque la reelección. Piensan que los Lupes, Bananas, Barrios, Carriles o cualquier otro no tienen nada que hacer frente a él, que está haciendo una administración eficiente y transparente.
Finalmente desistió el jurista queretano Santiago Nieto Castillo de continuar en su lucha para ser reinstalado en la Fiscalía de Delitos Electorales y ayer anunció su retiro, aunque varias corrientes políticas de oposición lo respaldaban.
Quien está teniendo una creciente participación en el Congreso de la Unión es el diputado federal Braulio Guerra Urbiola, que la próxima semana dará mucho de qué hablar con su propuesta para cancelar las comisiones en los retiros de los cajeros bancarios y con el lanzamiento de un libro sobre el cambio climático prologado ni más ni menos que por Mario Molina, Premio Nobel de Química.
Que ni Tania Ruiz ni Gustavo Nieto buscarán la presidencia municipal de San Juan del Río, en donde el Partido Revolucionario Institucional repetirá a Gerardo Sánchez para enfrentar oootra vez al panista Guillermo Vega, que ha hecho un gran trabajo y tiene la confianza de los ciudadanos y, por supuesto, de su partido.
-LA FRASE DE LA SEMANA-
Pifia.
¿Quién me ha robado mi cerdo?: Arturo Castañeda Olalde, candidato oficial a rector de la UAQ, al citar el libro ¿Quién me ha quitado mi queso?
Genial.
-JUGADA FINAL-
Lección.
A Francisco Domínguez, que fracasó en su intentona de poner rector en una universidad a la que ha negado todo apoyo, un ¡Jaque Mate al pastor!