TABLERO
- Rechaza tribunal electoral demanda de JJ
- Revoltura en Morena; le crecen los enanos
- Se afianza la candidatura de Kuri en el PAN
- Desaira Pancho las reuniones de seguridad
Misionero.
Por más de ocho años nuestro Noveno Obispo, don Faustino Armendáriz Jiménez, sirvió a la comunidad queretana con gran emoción y sin descanso. Imponiendo lo que en política Daniel Cosío Villegas llamaba el estilo personal, en este caso de evangelizar.
Aquí el ahora Arzobispo de Durango, que ya empezó a mover a sus nuevas ovejas, se hizo peregrino y encabezó nueve veces la romería al Tepeyac, además de hacer un centenar de giras por la Sierra Gorda, más que los dos últimos gobernadores del Estado.
Tuvo también inusual cercanía con los medios de comunicación a los que atendía, sin distingos, todas las semanas y también cuando se le requiriera para algún tema específico.
En el caso de PLAZA DE ARMAS que lo entrevistó por primera vez en Matamoros, al frente de la Diócesis de Tamaulipas y lo vio asumir en Durango, tuvimos docenas de encuentros y siempre fue solidario y generoso.
Así lo recordaremos siempre.
“No me voy, me llevan” nos dijo en la última plática como obispo, antes de despedirse de Querétaro el 31 de octubre con una celebración para la Virgen de Soriano acompañado de una veintena de obispos y decenas de miles de representantes de las 117 parroquias de la Diócesis a la que sirvió con amor y emoción.
El 21 de noviembre pasado tomó la encomienda que dispuso el Papa y asumió como responsable de una provincia que abarca Durango y las diócesis sufragáneas de Mazatlán, El Salto, Torreón y Gómez Palacio, en donde, admitió, extrañará a Querétaro, porque en nuestra tierra aprendió las manifestaciones de piedad popular y se enamoró de su centenaria Peregrinación al Tepeyac.
Y es que, como nos confesó (valga la expresión) él tenía la seguridad de permanecer aquí, en donde ninguno de sus antecesores había sido trasladado a otra sede episcopal, por lo que dejó muchos planes pendientes, incluido el de la catedral y nuevas parroquias, que quedarán en la decisión del nuevo obispo, cuya designación podría tardare un mes, dos, seis o hasta un año.
El proceso de elección, explicó, comenzaría hasta que el obispo ordinario toma posesión en la nueva sede, cosa que ya ocurrió. Mientras tanto se quedaría al frente un administrador, que resultó el obispo emérito, don Mario de Gasperín Gasperín.
Su última misa –emotiva como la que más- la ofició el domingo 17 de noviembre en el Seminario Conciliar de Hércules, acompañado por la imagen de la Patrona de Querétaro, la Virgen de los Dolores de Soriano. Ahí, explicó, “la vida de un pastor es una vida itinerante, donde ahora vamos a otro servicio donde Dios no pone, donde Dios nos pide, no importa el lugar, la distancia ni la realidad social”.
Lo importante, añadió, “es evangelizar y llevar a Jesucristo a los demás, como luchamos por hacerlo aquí y es lo mismo que vamos a hacer en Durango. A querer primero a nuestro pueblo, que ya lo queremos, y continuar realizando esta tarea incansable, porque tiene que serlo para dar frutos. O sea, tiene que ser permanente”.
¿Qué se lleva? Le preguntamos.
-El cariño de los queretanos. Me llevo la cultura de los queretanos. La fe de los queretanos y, sin duda, todo aquello que implica una realidad y una idiosincrasia de un pueblo muy valioso. Creo que muchos obispos querrán estar aquí en Querétaro.
¿ Y qué nos deja?
-Les dejo mi gratitud y también un trabajo que luchamos por realizar. La semilla del Evangelio que se sembró casa por casa, entre los jóvenes, entre los adultos, los ancianos, en los lugares muy desafiantes como fue la Colonia Juárez de San Juan del Río, el caminar por las vías, elencontrarnos a hermanos con adicciones terribles, el encontrarnos con situaciones de familias de vacío de fe, de violencia doméstica, pero al final de cuentas lo importante es que les llevamos a Jesús.
Previamente, en su última homilía a los queretanos, invocó el ejemplo de San Pedro y Pablo, hombres fieles hasta el sacrificio. “Hermanos, advirtió, no esperemos caminos evangelizadores, sobre todo quienes somos especialistas en ello, como somos los sacerdotes, los pastores, los agentes de pastoral laicos, sin el ingrediente del sacrificio y del dolor”.
Así, Faustino dijo adiós a los queretanos el 20 de noviembre, un día antes de tomar la Diócesis de Durango. Todavía en el Aeropuerto Internacional de Querétaro algunos feligreses le pedían que se quedara.
Imposible. Ya iba en camino, llevándose en el corazón la consigna de San Junípero Serra, de mirar siempre adelante y nunca retroceder. Va a extrañar mucho a Querétaro, declara –“aquí se queda parte de mi vida”- y espera regresar en viajes de descanso.
A los Armeros nos quedará el recuerdo de su carisma y apoyo en los años recios y necios, en donde siempre encontramos su mano, sintiéndolo –con respeto a su alta jerarquía- como un verdadero amigo.
Así se lo expresamos en la honrosa e inolvidable comida que compartimos, días antes de su partida, con el ya designado Arzobispo, mi Nena, nuestros hijos y el ex embajador en el Vaticano, Mariano Palacios Alcocer con su esposa Anita.
Testigos todos de su estilo personal, sencillo y cercano.
Gracias, don Faustino.
-BLANCAS Y NEGRAS-
Jota Jota.
Al negarle la protección de los derechos políticos invocados por Juan José Ruiz Rodríguez, la Sala Electoral del Poder Judicial de la Federación remitió el tema de la revocación o destitución del ex presidente estatal del PRI a las instancias partidistas en donde definitivamente ya no lo quieren.
A pesar de ello, sus amigos creen que Juan José todavía puede patalear porque puso a la mayoría de los dirigentes municipales y del comité estatal. Olvidan dos cosas: la decisión del líder nacional Alejandro Moreno “Alito” y la tradicional disciplina del tricolor. O sea, adiós.
En Morena andan confundidos. La división y disputa por el comité nacional también pega aquí, en donde algunos miembros sin lealtad probada presumen apoyos políticos del centro cuando no han dado buenos resultados en sus actuales cargos legislativos.
Con todo la carta abierta de Morena es la del súper delegado, senador con licencia y ex rector de la Universidad Autónoma de Querétaro, Gilberto Herrera Ruiz, sin perder de vista al zar antilavado Santiago Nieto Castillo. De los otros hablaremos después.
En el PAN, mientras tanto, avanzan los acuerdos en los grupos para sacar la candidatura de unidad en torno al todavía jefe de los senadores azules Mauricio Kuri González al gobierno estatal, que pasa por negociar posiciones en los ayuntamientos y en los congresos federal y local.
Se da por hecho que el ex aspirante presidencial Ricardo Anaya Cortés irá en el primer lugar en la lista pluri para San Lázaro con el proyecto de ser coordinador de la bancada. Los cabos sueltos son los ex alcaldes Armando Rivera Castillejos y Marcos Aguilar Vega que a lo mejor no ganan pero pueden ayudar a perder.
La política es así.
-LA FRASE DE LA SEMANA-
Sinceridad.
Las reuniones de seguridad que son de la mañana no las encabezo yo. No le veo caso en la cuestión de Querétaro: Francisco Domínguez Servién.
¿Cómo para qué, no?
-JUGADA FINAL-
La 4-T.
A los morenos que buscan en la CDMX los apoyos políticos que no tienen acá donde se les conoce, un oportunista y traicionero ¡Jaque Mate!