Desde el inicio de su internamiento, hace casi 30 años, Claudia Mijangos Arzac deseaba recobrar la libertad, como consta en algunos de los textos que escribió en el penal de San José El Alto, a los que PLAZA DE ARMAS, El Periódico de Querétaro, ha tenido acceso y hoy recupera a 90 días de su posible salida del reclusorio para mujeres de Tepepan, en la Ciudad de México, de no haber opinión médica en contra.
“Si salgo libre” escribió con lápiz, consciente de que su destino, entonces, como ahora, dependía de profesionales de la salud. “Si sale todo bien, bendito sea Dios, los médicos decidirán más adelante. Pero si no saliera favorable, me ayudarás para que me orientes para que los años me sean menos…”
En el documento, dirigido a persona no indentificada, la filicida que conmocionó a la sociedad queretana al dar muerte a sus tres hijos menores de edad la madrugada del 24 de abril de 1989, se planteaba dos escenarios:
“Si salgo libre, buscar casa o apartamento. Cambiar tapices muebles. Algunos venderlos. Si me quedo. Quedarme con unos muebles recién comprados y vender el resto”.
Para ello decía contar con los siguientes recursos: joyas y 55 mil 400 dólares. Ventas mensuales en su tienda por 18 mil pesos. La casa de Jardines de la Hacienda. Terreno en Amazcala y un condominio con tres años pagados de cinco.
No es posible conocer hoy el destino de esos bienes, excepto que la casa de Hacienda Vegil, en donde ocurrieron los hechos, fue intervenida por el Municipio y se encuentra tapiada a petición de los vecinos, luego de ser vandalizada y utilizarse para ritos pretendidamente satánicos.
Lo cierto es que dentro de 90 días Claudia Mijangos Arzac, próxima a cumplir 63 años, podría salir libre, al cumplirse el periodo de internamiento de tres décadas (equivalentes a la pena máxima de entonces) ordenado por el juez Arturo González de Cosío que la consideró inimputable.
La resolución, que técnicamente no fue sentencia, contemplaba reducir el plazo si la ciencia médica descubría una cura para sus problemas mentales, diagnosticados por expertos.
No habiendo en Querétaro un lugar especializado para su tratamiento y a petición de los abogados Julio Esponda y Miguel Alcocer, la señora Mijangos fue trasladada al área siquiátrica del Centro de Readaptación Social de Tepepepan, en donde ha cumplido la mayor parte del plazo que concluye el próximo 24 de abril de 2019.
Claudia será libre ese día, de no mediar un dictamen médico que recomiende lo contrario.
OPINIÓN DE EXPERTOS
En ello coincidieron, consultados por este periódico, el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Querétaro, Antonio Ortega Cerbón, el ex juez y ex magistrado que la recluyó Arturo González de Cosío, la ex agente del ministerio público Sara Feregrino Feregrino que la interrogó el día del triple filicidio y el presidente de la Confederación Nacional de Colegios y Asociaciones de Abogados de México, Ricardo Cárdenas Gracia.
Especialistas en derecho todos ellos, comentaron que solamente un dictamen médico podría impedir la completa liberación de Claudia Mijangos, en cuyo caso tendría que internarse en otra institución, bajo la responsabilidad de sus familiares.
Arturo González de Cosío, el juez del caso, hoy magistrado en retiro, dijo que Claudia deberá salir dentro de tres meses al cumplirse el internamiento ordenado por él, a menos de que no esté condiciones de acuerdo con los médicos y en cuyo caso deberá trasladarse a institución especializada.
En los mismos términos opinó el ex presidente del Colegio de Abogados Litigantes y actual dirigente de la CONCAAM, Ricardo Cárdenas Gracia, recordando que la ley de ejecuciones penales ha cambiado pero en cualquier caso aplica a favor de su liberación, siempre y cuando la opinión médica recomiende la medida de internamiento por considerarla un riesgo para ella misma y la sociedad.
De acuerdo con las investigaciones realizada por la entonces agente del Ministerio Público Sara Feregrino, la joven madre –ex reina de belleza del Carnaval de Mazatlán- se desquició por un conflicto con su esposo que le había amenazado con quitarle a los niños.
Por su parte el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Antonio Ortega Cerbón dijo que la eventual liberación de Claudia Mijangos en abril próximo no es un tema jurídico sino de salud y serán los médicos del área psiquiátrica del Centro de Readaptación Femenil de Tepepan, en Tlalpan, quienes determinen si está en condiciones de reintegrarse a la vida social. De ser así tendría que ser liberada.
Explicó que dentro de tres meses el titular del Juzgado Primero de Primera Instancia Penal tendría que emitir una boleta de libertad en el expediente 224/189 y comunicársela a las autoridades penitenciarias de la Ciudad de México porque Claudia no debe permanecer ni un día más enclaustrada. A menos, advierte Ortega de que los médicos a cargo de Claudia resolvieran que aún no ha recuperado la salud. De tal modo que sería un tema no Judicial ni del Poder Ejecutivo del Estado, a cuya disposición está, sino médico.
La filicida ingresó originalmente al Cereso Femenil de San José El Alto el 28 de abril de 1989, pero los 30 años de internamiento comienzan a contar desde el 24 de abril de 1989, cuando fue recluida en una sala de la Clínica del Seguro Social para su atención.
Así las cosas, Claudia Mijangos Arzac deberá recuperar su libertad el 24 de abril de 2019 o ser ingresada a una institución médica, si así lo consideraran los especialistas y sus familiares. La autoridad jurisdiccional ya no puede intervenir, advirtió el presidente del Tribunal, Antonio Ortega Cerbón.
POR: SERGIO ARTURO VENEGAS ALARCÓN