ANTORCHA CAMPESINA
Municipio de Querétaro, un tiradero
Desastroso, por decir lo menos fue el resultado el gobierno de los ahora candidatos a una diputación federal plurinominal, Marcos Aguilar Vega y a la diputación local del segundo distrito, Manuel Velázquez Pegueros. En la historia de la capital del estado de Querétaro, reconocido por muchos años como una de las ciudades más ordenadas, limpias y seguras, que lo hizo merecedor a reconocimientos de nivel nacional e internacional no se registra gobierno igual.
A los pocos días de que Marcos Aguilar tomó el poder municipal anunció su proyecto de invertir el dinero del erario en obras no prioritarias, como pintar los puentes con un costo, en una primera etapa, de 16 millones de pesos; se declaró incompetente para mantener limpia la ciudad y concesionó el servicio de recolección de basura a una empresa de sus amigos y correligionarios panistas, despidiendo a muchos trabajadores y a otros rebajándoles su salario hasta por 400 pesos por semana; contrató un helicóptero para que sobrevolara la ciudad supuestamente para combatir la delincuencia, con un costo de más de 40 mil pesos diarios que no dio resultados y terminó por cancelar; intentó vender, como si fueran de su propiedad, las casas de cultura y bibliotecas de la capital, que se salvaron de milagro por las protestas de escritores, pintores, actores y músicos que le demostraron que los bienes públicos no se pueden vender.
Ordenó a su entonces jefe de seguridad pública castigar con arresto a los elementos que fueran sorprendidos consumiendo alimentos en la vía pública, e incumplió sus promesas de vivienda y prestaciones, situación que terminó con la salida del titular de la corporación. Propuso como parte de un proceso para adecuar los reglamentos de los mercados municipales, que en ningún caso se autorizaba que un locatario o comerciante transfiera el local a familiares o a quien ellos decidiera. Entre las causas para cancelar la licencia otorgada, está en primer término la muerte del titular, incapacidad del titular o porque el local permanezca cerrado por 30 días consecutivos o 90 días a lo largo de un año.
Aguilar Vega y Velázquez Pegueros intentaron sin éxito “democratizar” la vía pública rentándole las calles del centro histórico a la empresa Aquiles Park para la instalación de parquímetros por 15 años, sin tomar en cuenta la opinión de los vecinos afectados y de los comerciantes del centro histórico; provocó el cierre y pérdida de cantidades importante a los comerciantes de la avenida Ezequiel Montes al adoquinar y reducir el arroyo vehicular, con materiales de mala calidad; gastó 140 millones de pesos en la creación de su “ciudad de vanguardia” con la nueva semaforización que ha provocado tremendo caos en la ciudad; y por si hicieran falta problemas en la movilidad de la población, creó ciclopistas que nadie usa en las más angostas e importantes avenidas como Avenida Corregidora y Universidad entre muchas otras.
Y mientras, los problemas de inseguridad, de la proliferación de antros y bares en el centro histórico, la reparación de drenaje pluvial y sanitario para evitar las inundaciones que se avecinan, la falta de escuelas, clínicas, servicios públicos para las colonias marginadas como agua potable, energía eléctrica, pavimento, etcétera, esas que esperen, al fin que la gente aguanta, pensaron los ensoberbecidos Marcos Aguilar y Velázquez Pegueros. Eso hicieron con las demandas de los colonos y campesinos organizados en el Movimiento Antorchista, quienes después de más de dos años de insistir en que se resuelvan las obras de electrificación de la colonia Melchor Ocampo, ubicada en San José el Alto; la regularización en el pago del predial de la colonia Tlanese, ejido San Pablo o siquiera el proyecto (en papel) de las obras de agua y drenaje para que se ejecuten con recursos federales conseguidos por diputados federales antorchistas quienes recientemente, para su sorpresa, fueron notificados que sus obras ya fueron resueltas con un gasto de 195 millones 567 mil pesos en varias obras en más de 20 colonias y comunidades de Menchaca, Santa Rosa Jáuregui, San José El Alto, pero que no son demandas solicitadas por el antorchismo.
Con su tiradero, Marcos Aguilar y Velázquez Pegueros han contribuido al descrédito de los candidatos de Acción Nacional y sin duda perderán votos en la próxima contienda por la capital. Así será!
jerogurrola@yahoo.com.mx
@jgurrolagrave