AGENCIAS
Según el ilustre arqueólogo Alfonso Caso, Teopan fue la más antigua e importante de las cuatro parcialidades de Tenochtitlan, y ese estatus se expresaba en la grandeza de los centros ceremoniales de sus 18 barrios, como ahora lo han comprobado arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) al descubrir a escasos centímetros de la Plaza Pino Suárez, restos de una subestructura prehispánica que debió ser parte de la delimitación del espacio sagrado del calpulli de Cuezcontitlan, “Lugar de las trojes” o “Donde están las trojes”.
La arqueóloga Donají Montero Guzmán, de la Dirección de Salvamento Arqueológico (DSA) del INAH, refiere que hace poco más de un mes se procedió al rescate de estos vestigios arquitectónicos que quedaron expuestos con la apertura de dos calas, durante los trabajos del proyecto de rehabilitación integral que realiza en el lugar la Autoridad del Espacio Público de la Ciudad de México.
Las líneas de estudio en materia arqueológica, impulsadas por la Secretaría de Cultura y el INAH, han derivado en el avance de diversas investigaciones, entre ellas el Templo de Ehécatl en el Templo Mayor de Tenochtitlan; los restos de un recinto de nobles mexicas que habitaron el barrio de Colhuacatonco, en la calle República del Perú; la detección de un posible túnel en la Plaza y Pirámide de la Luna, en Teotihuacan; y el descubrimiento del zócalo original de la Ciudad de México, durante las labores de rehabilitación de la Plaza de la Constitución.