BLINDAJE FINANCIERO
Coyuntura preocupante en las finanzas públicas
A partir de hoy, Plaza de Armas publica Blindaje Financiero, una columna cuyo objetivo es analizar de manera crítica el estado actual de la economía y de las finanzas públicas de nuestro país.
El género de opinión que ponemos a disposición de los lectores en general; y de los interesados en el tema, en particular, estará disponible en este espacio los días lunes, miércoles y viernes de cada semana.
Agradezco al Armero, Sergio Arturo Venegas Ramírez, la oportunidad que me brinda para iniciarme como columnista especializado en economía y finanzas, tras 30 años de experiencia adquirida como reportero de economía y finanzas.
La ocasión es más que propicia porque las finanzas públicas atraviesan por una coyuntura difícil y preocupante, por varios motivos o razones que iremos comentando poco a poco.
Por el momento basta con señalar que, con el propósito de impulsar el crecimiento económico, en el sexenio de Felipe Calderón se reanudó el endeudamiento del país y se profundizó durante la administración de Enrique Peña Nieto.
Paralelamente, durante los últimos años disminuyeron dramáticamente los ingresos petroleros, como consecuencia de una disminución en la plataforma de producción de petróleo y en el precio de la mezcla mexicana de exportación.
Hace 12 años la plataforma de producción de petróleo era de 3.1 millones de barriles de petróleo pero en este será de 2 millones; y el precio de la mezcla mexicana, que en enero de 2014 fue de 100 dólares por barril, ahora está en 35.
Así, los ingresos petroleros, que antes contribuían con hasta 40 por ciento de los ingresos presupuestarios del sector público federal, en 2016 contribuyeron con sólo 15 por ciento.
Los menores ingresos petroleros fueron compensados con los mayores ingresos tributarios generados por la reforma fiscal que aprobó el Congreso de la Unión a finales de 2013 y entró en vigor a partir de 2014.
Así, México evolucionó de la despetrolización hacia la tributarización de las finanzas públicas, las cuales ahora, a diferencia del pasado, dependen más de los impuestos de los contribuyentes que de los ingresos petroleros.
Sin embargo, ahora son tan vulnerables como cuando dependían más del petróleo que los impuestos de los contribuyentes, porque no se alcanzaron las tasas de crecimiento económico potencial, estimadas en 5 por ciento.
Pese al endeudamiento, el crecimiento del PIB nacional fue de 2.4 por ciento en 2016; y en el primer trimestre de 2017, de 2.8 por ciento.
Lejos de convertirse en un motor del crecimiento, el nivel de la deuda amplia del sector público alcanzó un nivel equivalente a 50.5 por ciento del Producto Interno Bruto, y junto a su creciente costo financiero es un lastre para el país.
Por ello, la presente administración inició un proceso de consolidación fiscal, que consiste en reducir el gasto, las necesidades de endeudamiento nuevo, y el nivel del saldo histórico de la deuda amplia del sector público.
Se trata de una política fiscal restrictiva que junto con la política monetaria del Banco de México, también restrictiva, porque el alza de tasas de interés encarece el crédito y desincentiva el consumo, podría desacelerar el crecimiento económico.
Por cierto, los remanentes del Banco de México han contribuido reducir los requerimientos financieros del sector público, definidos como las necesidades de deuda nueva adicional, pero no el saldo histórico de la deuda amplia.
Otros rubros de gasto que también ejercen presión sobre las finanzas públicas son el pasivo pensionario, definido como la deuda del Estado mexicano con los jubilados y pensionados; y las transferencias federales a estados y municipios, algunos de los cuales también se han sobre endeudado sin detonar crecimiento económico ni reducir la pobreza.
De todo ello y más comentaremos en las siguientes entregas.
*Maestrante en el Programa de Posgrado en Derecho con Orientación Constitucional, de la Universidad Nacional Autónoma de México; Licenciado en Periodismo y Comunicación Colectiva por la UNAM; y reportero con experiencia de 30 años en cobertura de economía y finanzas.