El dueño de un bar ubicado en Constituyentes y que cerró hace unas semanas, murió en El Mirador, cuando vecinos lo detuvieron por supuestamente escandadlizar. Otros lo acusaron erróneamente de haber robado en una casa. Lo cierto es que elementos de seguridad y vecinos lo tiraron al suelo y le amaarraron las manos con un cinturon. El hombre pedía que lo soltaran porque tenía ganas de vomitar, pero no les importó. Murió minutos después. Al lugar arribaron elementos de la Fiscalía del Estado para realizar las primeras investigaciones.
Se supo que la persona había bebido durante la noche por problemas familiares y que temprano salió de su casa al área de uso común. Fue ahí donde lo retuvieron por gritar y actuar de manera “sospechosa”.
Por la tarde vecinos del cláustro realizaron una junta pues el hecho conmocionó al condominio. Y no es para menos, uno de sus vecinos falleció la mañana de este lunes en condiciones por lo menos extrañas.
POR: REDACCIÓN