El atentado la noche del lunes en la Manchester Arena dejó 22 muertos y 59 heridos y hasta el momento no ha sido posible aclarar con precisión que fue lo que sucedió, por su parte el Estado Islámico ya se adjudicó el ataque.
Mientras avanzan las investigaciones, lo que sí empieza a salir a la luz son algunas historias personales de los testigos de la tragedia. Como la de Chris Parker, un hombre sin hogar de 33 años que sostuvo entre sus brazos a una de las víctimas mortales del atentado.
Medios locales recogieron el testimonio de Parker: “Todo el mundo estaba contento. Cuando la gente salía por las puertas de cristal, escuché un ruido y, en una fracción de segundo, vi humo. Entonces escuché gritos. Me tiré al suelo y luego me levanté. En lugar de huir, mi instinto me dijo que intentara ayudar”.
El hombre en ese momento abrazó a una niña que había acudido al concierto de Ariana Grande con su madre. Después, intentó ayudar a una mujer de 60 años, que terminó muriendo en sus brazos. “No he parado de llorar”, apuntó Parker.
La noche de Chris no se detuvo ahí, el hombre sin hogar ayudó a una niña que estaba perdida entra la multitud. El hombre la llevó hasta uno de los puestos donde vendían artículos de Ariana Grande y la dejó con responsables de seguridad para que pudiera reunirse con sus padres.
Una bomba explotó en el recinto alrededor de las 22:35 h, tiempo local. Entre las víctimas fatales y los heridos hay muchos menores. El atacante murió en el lugar de los hechos a causa de una de las explosiones.
POR: LÓPEZ-DÓRIGA.COM