Jesús Vizcarra Calderón, dueño de los laboratorios Salud Digna y de la empresa SuKarne, habló por primera vez luego que el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, reconoció que viajó en un avión privado que le pertenece.
La aeronave fue utilizada por el mandatario sinaloense para viajar a Los Ángeles, California, el mismo día de la detención del líder fundador del Cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada, y del asesinato del exrector de la UAS, Héctor Melesio Cuén.
Según el gobernador morenista, Vizcarra insistió en que lo usaran como un préstamo, argumentando que era más conveniente que rentarlo, ya que el proceso de renta implicaba mayores complicaciones aduanales en Estados Unidos.
El empresario sinaloense, ante la información difundida en medios de comunicación y redes, calificó como “infundios” los comentarios acerca de que su empresas e instituciones han sido financiadas con recursos ilícitos.
Señaló que estos comentarios afectan a su familia, a sus más de 30 mil colaboradores, consejeros, además de a SuKarne, “que por 55 años ha operado en estricto apego a las leyes y regulaciones nacionales e internacionales, dejando en alto el nombre de México en los mercados de cuatro continentes”.
Respecto a Salud Digna, Vizcarra Calderón aseguró que se atreven a “injuriar, sin la menor reserva, a nuestra mayor iniciativa social, la cadena de clínicas de diagnóstico Salud Digna, a la que he dedicado durante más de 20 años tiempo, emoción y recursos y que, además de ser uno de mis grandes orgullos y apuestas hacia la trascendencia en bien de los demás”.
El empresario indicó que el vuelo del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, en la aeronave de Servicios Ejecutivos Aéreos Viz, fue solicitado por Rubén Rocha Ruiz “y concedido debido a la amistad con su familia, que data de 28 años, cuando Rocha era Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, y yo asumí la presidencia del Patronato del Hospital Civil de Culiacán, en donde conté con su apoyo incondicional para lograr la transformación de ese centro comunitario de salud”.
Vizcarra Calderón apuntó que en sus más de 50 años de trabajo, “ni un solo centavo de origen ilícito ha ingresado a ninguna empresa o institución con la que mi familia o yo hemos estado o estamos relacionados”.
