La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) señaló que agotará todos los recursos legales para evitar que Daniel Ramírez Medina, ‘dreamer’ mexicano detenido en Seattle por autoridades migratorias de Estados Unidos, sea deportado.
Carlos Sada Solana, subsecretario de la Secretaría de Relaciones Exteriores para América del Norte, indicó que “lo que estamos haciendo es reaccionar de inmediato a estos casos”.
“Tenemos ya un abogado de nosotros, estamos reforzándolo con otro abogado, y son casos que se van a pelear en las cortes, no lo van a deportar de inmediato y pelearemos hasta que se agoten todos los procedimientos legales”, afirmó.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva, Sada Solana dijo que no existe una una cacería en contra de los dreamers, pero que las autoridades migratorias de EE.UU. solo están deteniendo a migrantes con órdenes de deportación.
“No hay una cacería en contra de estos muchachos. Sí hay un cambio, una realidad de que están yendo a aprehender a los migrantes que tienen órdenes de deportación”, explicó.
Detalló que Daniel Ramírez fue detenido pese a que cuenta con un permiso de permanencia legal temporal y agregó que las autoridades migratorias señalaron que al momento de su detención, el joven de 23 años dijo pertenecer a una banda, lo que les pareció una situación “extraña”.
“Nuestra encargada del consulado en Seattle estuvo ayer hablando con el papá, de manera que el papá pudiera también asentar qué pasó en este proceso y fortalecer las instancias legales y, por otro lado, seguir hablando con las autoridades de migración para que este tipo de casos no se repitan porque tienen una protección adecuada”, añadió.
Ramírez Medina es el primer beneficiario del DACA que resulta detenido bajo el gobierno del presidente Donald Trump, fue confinado desde el pasado viernes en un centro de detención de inmigrantes en Tacoma, estado de Washington.
El joven, quien llegó a Estados Unidos en 2001 acompañando a sus padres cuando tenia siete años de edad, fue detenido por agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) cuando los oficiales llegaron a su casa para arrestar a su padre.
Los documentos ante la corte señalan que cuando los agentes entraron en la casa, le preguntaron: “¿está usted legalmente acá?”, a lo que Ramírez respondió: “sí, tengo un permiso de trabajo”, pero luego fue detenido.
El joven inmigrante interpuso con la ayuda de más de una docena de abogados un recurso de “habeas corpus” contra su detención, argumentando la ilegalidad del procedimiento, debido a que cuenta con un permiso de trabajo legítimo y carece de antecedentes penales.
El recurso presentado ante la Corte Federal del Distrito Oeste de Washington abrió un caso que podría dar pie a una batalla legal que marcaría la suerte de unos 750 mil jóvenes beneficiarios de DACA.