- Queretano en escándalo del casinero y Los Zetas
- Investiga UIF a empresas fachada en Querétaro
- Roberto Loyola ha guardado silencio sobre 2015
- Ernesto Cordero padrino de bodas de Chespirito
Les había tocado nomás la de ganar: Sabino
Ruleta.
Escribir del empresario Javier Rodríguez Borgio, es entrar en terrenos peligrosos en todos los sentidos. Desde llamadas telefónicas pidiendo que se le deje en paz, veladas amenazas o de plano, demandas ante tribunales por presuntos daños morales, etcétera, etcétera. Eso lo hemos vivido en el periódico PLAZA DE ARMAS sobre todo desde la llegada de Francisco Domínguez Servién al poder.
Es pública la relación entre ambos personajes.
-“Yo siempre he dicho que Javier Rodríguez Borgio es mi amigo y este… yo a mis amigos no los niego, pero una cosa es la política y otra cosa son sus negocios”, reconoció Domínguez Servién, siendo senador, a pregunta de PLAZA DE ARMAS, luego de finalizar un informe del entonces rector, Gilberto Herrera Ruiz.
– “Eh… me ha aportado… me aportó recursos… este… como amigo, como lo dije, entre muchos amigos que lo hicieron, pero no sé qué relación tiene Javier Rodríguez con estos temas”, declaró antes de salir corriendo.
Luego vino la campaña para gobernador, donde supuestamente recibió “30 kilos” del “señor Kors. Ahora sabemos que fueron 30 millones de pesos del entonces secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. El tema se ventiló en 2015 y Domínguez Servién nunca aclaró nada.
Lo que no sabíamos es que por esos mismos días, el empresario queretano Antonio Rico Rico le entregó, según declaró su entonces socio, Sergio Bustamante, otros 30 millones de pesos para la campaña.
“La suma de los tres portafolios de acuerdo a lo que Rico Rico me comentó fue de 30 millones en efectivo, mismos que me consta fueron entregados para la campaña de Pancho Domínguez”, declaró Bustamante en la causa penal 269/2009, que mantiene hoy día en la cárcel al empresario queretano.
Además, Bustamante narra el momento en que Antonio Rico le entrega al actual secretario de Desarrollo Sustentable y operador de la campaña de Domínguez, el dinero: “… las palabras textuales de Rico Rico fueron ‘Marquito (Del Prete) aquí está lo que quedamos, dile a Pancho (se refería a Francisco Domínguez) que es lo que acordó con Javier (se refería a Javier Rodríguez Borgio) y conmigo, sólo dile que le diga a Pancho que con todo”.
Es decir, además de que Pancho Domínguez dice que no niega a sus amigos, hay claros vínculos con el empresario casinero que hoy está metido en otro escándalo.
Según la revista Proceso un informe de las autoridades españolas detalla las conversaciones entre Francisco Javier Rodríguez Borgio, pieza clave de la operación fraudulenta de la Caja Libertad, y Fernando García Alonso (presuntamente hijo del ex alcalde de Querétaro, Rolando García Ortiz), presunto contacto del representante de Los Zetas en Europa, El Mono Muñoz.
Señala el semanario que “para evadir a la justicia mexicana, el empresario Francisco Javier Rodríguez Borgio se instaló en España donde recurrió a los servicios del mexicano Fernando García Alonso, quien presumía de contactos en la policía de ese país, para que le informara si aquí estaba vigente una ficha roja de la Interpol para detenerlo y extraditarlo a México.
En sus comunicaciones telefónicas y por mensajería, Rodríguez Borgio alardeaba ante García Alonso del enorme poder que tenía por su contacto cercanos al “Águila”, en alusión al entonces presidente Enrique Peña Nieto, por el águila de la bandera mexicana en la banda presidencial. “Lo que desconocía era que la policía española tenía intervenidas las comunicaciones de García Alonso, porque lo consideraba el hombre de confianza de Juan Manuel “El Mono” Muñoz Luévano, el prominente enlace de Los Zetas en Europa que fue seguido meticulosamente desde 2013 hasta su captura en Madrid en marzo de 2016.
Dice Proceso que las comunicaciones entre García Alonso y Rodríguez Borgio, intervenidas por orden judicial, están en un informe de la Brigada de Investigación de Blanqueo de Capitales y Anticorrupción de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional sobre la red del Mono Muñoz y sus operaciones de narcotráfico, fechado en julio de 2014, al que este semanario tuvo acceso.
En aquel momento, sobre Rodríguez Borgio y su hermano Óscar pesaba una orden de aprehensión en México por la falsificación de una licencia de la Dirección Adjunta de Juegos y Sorteos de la Secretaría de Gobernación para apropiarse de los casinos de otro empresario y sumarlos a su holding Big Bola.
Y concluye que en marzo de ese año, la entonces Procuraduría General de la República (PGR) había ordenado congelar las cuentas de su Grupo Gasolinero México (GGM) –de la que los hermanos eran propietarios junto con Martín Díaz Álvarez, sobrino del exsecretario de Hacienda Francisco Gil Díaz– por la compraventa de hidrocarburo robado a Pemex.
De ese calibre son las amistades del gobernador Francisco Domínguez, solamente hablando del financiamiento de su campaña.
Esto nada tiene qué ver con los sobornos que, se asegura, recibió por aprobar la reforma energética. Ese es otro tema.
Todo conduce a Pancho.
-OÍDO EN EL 1810-
Sin salida.
Que los cercanos al ex alcalde de Colón, Alejandro Ochoa Valencia, lamentan su caída y encarcelamiento porque, dicen, tenía mucho futuro, porque Francisco Domínguez Servién le había ofrecido la candidatura a diputado federal para hacerlo desistir de su pretensión por la gubernatura y no aceptó.
La ambición mató al gato.
-¡PREEEPAREN!-
El Querétaro real.
De enero a julio la Unidad de Inteligencia Financiera, encabezada por nuestro paisano Santiago Nieto Castillo, ha detectado movimientos inusuales por más de 90 mil millones de pesos en Querétaro.
El zar antivalado reveló lo anterior en el foro “Evaluación Nacional de Riesgos” y que se investigan a 148 personas en el estado.
De hecho se ubicaron 165 empresas de reciente creación que pudieran ser posibles fachadas.
Aquí donde no pasaba nada.
Así de fácil.
Así de difícil.
-¡AAAPUNTEN!-
Agraviado.
Poco se ha hablado del ex candidato del PRI al gobierno de Querétaro, Roberto Loyola Vera, tras revelarse el financiamiento desde gobernación para el fraude electoral que llevó a Pancho Domínguez a Palacio de la Corregidora.
El también ex alcalde es un hombre discreto que desde aquel entonces se ha reservado su opinión de Domínguez y lo sucedido antes y durante la jornada electoral.
¿Irá por la segunda?
-¡FUEGO!-
Chespirito
Que el ahora muy famoso Guillermo Gutiérrez Badillo -el del video de los sobornos, que aseguran ya salió del país- estaba tan cerca e identificado con el grupo fuerte del PAN, gracias a Francisco Domínguez, que su padrino de bodas fue el mismísimo ex secretario de Hacienda y ex líder senatorial Ernesto Cordero, hoy también acusado. ¿Y ahora quién podrá defenderlo?
¡Porca miseria!