SERENDIPIA
La crisis del sistema de salud
A la ruta de bombas y sacudidas que se han detonado en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, es necesario añadir una relativamente antigua y grave que en algún momento estallará en un futuro no lejano: la crisis del sistema de salud.
Al final del gobierno del presidente Enrique Peña se tenía clara la dimensión de la crisis financiera en las instituciones de salud, que hasta el gobierno anterior gastaban cerca de 100 mil millones de pesos anuales, 87 por ciento de su presupuesto, en atender a las personas que llegan para atenderse de sobrepeso, diabetes y enfermedades cardiovasculares.
Si la situación ya era complicada en el IMSS y los hospitales de la Secretaría de Salud y el ISSSTE,ahora podría volverse una pesadilla para los derechohabientes.
A los recortes presupuestales de 4 mil millones de pesos en el Seguro Social, habrá que añadir el aumento de un día para otro en el número de personas que asisten a atenderse a cualquiera de las instituciones médicas
públicas.
Sólo tomando en cuenta a los servidores públicos que ya no contarán con seguro de gastos médicos mayores –alrededor de 700 mil–, más los jóvenes que recibirán las becas del nuevo gobierno, los choferes de la pipas que transportarán los combustibles en el país y otros grupos vulnerables, todos juntos estarían representando, de sopetón, alrededor de un millón de derechohabientes adicionales, con menos recursos humanos y presupuestarios para atenderlos.
Alrededor de 250 mil mexicanos mueren cada año por enfermedades asociadas a la obesidad que afecta a 51 millones de personas, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública.
Uno de cada tres niños mexicanos está en riesgo de contraer la diabetes que en 2018 padecían 12 millones de adultos, un millón más que tres años antes.
Un estudio de la Organización Mundial de la Salud determinó que México es el país con más muertes por esta enfermedad en América Latina, y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) le dio el primer sitio de 32 naciones en la prevalencia de diabetes mellitus en la población de entre 20 y 79 años.
El diagnóstico del nuevo gobierno es también de pesadilla. Para enfrentar la crisis, nomás para empezar, se invertirán 10 mil millones para rescatar a más de 50 hospitales abandonados.
AMLO EN HIDALGO
El Presidente estuvo en los municipios donde el robo de combustible es parte de la vida cotidiana. Ahí anunció apoyos económicos para un millón de habitantes de la zona, en lo que AMLOespera que sea un especie de exorcismo para que la comunidad expulse de su alma y de su vida a los huachicoleros.
¿Le harán caso al Presidente? Los que no le han dado mucha bola son los señores del huachicol, que en las últimas horas pusieron fuera de acción la mayoría de los ductos de Pemex, incluidos el del tramo Tuxpan-Azcapotzalco, ya restablecido, y el Salamanca-Guadalajara.