Gran molestia causó la desorganización e irregularidades con las que fueron entregados los boletos para el concierto de la banda mexicana Café Tacuba, que se presentará mañana en la Plaza de Toros Santa María como parte de los festejos por el 486 Aniversario de la Fundación de la Ciudad de Querétaro. Desde la madrugada del jueves decenas de personas se dieron cita en las inmediaciones del Cineteatro Rosalío Solano, donde acamparon para apartar su lugar y ser de las primeras personas en obtener un pase para ver al grupo, mismo que había sido programado para presentarse en la Plaza Fundadores, lugar que según se habría sido cambiado para un mayor control en la logística.
A pesar de que las filas de personas formadas entre las calles del Centro de Querétaro eran interminables, para muchas de las personas que ahí se encontraban fue poco creíble la rapidez con la que se terminaron los más de 10 mil pases, hecho que denunciaron fans a través de redes sociales donde señalaron que incluso personal administrativo del municipio de Querétaro y hasta policías fueron formados en el lugar para obtener boletos. Además de ello, también se denunció que había personas que traían más de dos pases, que era el número que estarían dando por personas, y los cuales estaban siendo vendidos desde 200 y hasta 500 pesos. Ese mismo hecho se replicó en internet, donde a través de grupos como “Ofertas en Calientes”, ya había personas subastando pases VIP y Preferentes, así como para el Ruedo para el mejor postor.
Automovilistas se dijeron molestos, pues las calles se vieron colapsadas porque en ningún momento se observó la participación de autoridades para dirigir el tráfico y evitar congestiones, de hecho, las personas que estaban formadas lo hicieron como mejor les parecía, lo que abonó al descontrol de los lugares para obtener un boleto y que propició que muchas personas fueran metidas a las filas de manera indiscriminada. Posteriormente, el edil anunció vía Facebook la apertura de una nueva fecha en el estadio Corregidora el domingo 30 de julio.
POR: VÍCTOR POLENCIANO