PODER Y DINERO

Inicia la tempestad perfecta de demagogia

Ya se definió la mitad del mapa político presidencial. Los partidos tienen sus cartas para las elecciones de 2018. José Antonio Meade, por el PRI-PVEM y posiblemente el PANAL, Ricardo Anaya por el Frente Ciudadano formado por la izquierda perredista y la derecha panista, así como el candidato sentimental de la ultraizquierda radical, Andrés Manuel López Obrador, de Morena.
En cuanto a los independientes, se van definiendo. Jaime Rodríguez, todavía gobernador de Nuevo León, está a un paso de convertirse en candidato, mientras la tendencia habla que podrían lograr la candidatura Margarita Zavala, Armando Ríos Piter y María de Jesús Patricio Martínez, del EZLN. Ya no hay espacio para más. La boleta tendrá entre cuatro y siete candidatos presidenciales. Aún no se definen estas candidaturas, ya que se espera el 14 de febrero para que el mapa este oficializado, de acuerdo a los tiempos del Instituto Nacional Electoral, que comanda Lorenzo Córdova, para que los partidos registren a sus aspirantes. Sin embargo, las propuestas huecas y demagógicas se dan en todos los partidos. Hablan, como Anaya, de un salario universal, con el fin de mejorar las condiciones de vida de la sociedad, pero no dicen el “cómo”. Es fácil prometer y después cumplirlo sin romper las leyes del mercado económico, lo que generaría disparos inflacionarios si se hace violentamente, serían incontrolables. O, el acabar con la corrupción, que es la bandera de todos los candidatos y que ha sido la propuesta desde la campaña política de Miguel de la Madrid. Y no se ha cumplido la palabra de los candidatos ungidos presidentes. Mismas promesas de toooodos y difícilmente las podrán cumplir. Prometer hasta ganar y una vez ganado, se olvida lo prometido.
PODEROSOS CABALLEROS: Tanto el PAN como el PRD colocan contra la pared al Poder Legislativo, con el afán de atraer las candilejas electorales. El tema ahora es la Ley de Seguridad Interior, donde no quieren que se “militarice” al país. No quieren establecer marcos jurídicos a las Fuerzas Armadas para después convertirlas en rehenes de sus disputas políticas. No explican su malestar con puntos exactos de la ley, sólo generalidades. Triste papel opositor.
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Al cumplirse un año del encarcelamiento del exgobernador Guillermo Padrés Elías es importante que Sonora recupere los recursos que fueron desfalcados durante la pasada administración, así lo señaló Claudia Pavlovich Arellano. Pero, todo parece indicar que sería materialmente imposible que lo logren los sonorenses, por errores procedimentales en las denuncias penales realizadas por la Procuraduría General de la República, que ahora encabezada por Elías Beltrán.
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Que grave es que Andrés Manuel López Obrador no reflexione lo que dice. Es obvio que tiene cientos de miles de seguidores; muchos de ellos fanáticos. Al momento de referirse a Ricardo Anaya o José Antonio Meade, de “blancos pirruris”, despierta (como lo hizo en 2006) un clima racista de consecuencias incalculables. El es blanco de piel e incluso se llamó orgulloso de sus raíces españolas. Por eso, sólo habla por hablar. No entiende la trascendencia de sus palabras en una sociedad empobrecida por la corrupción política.
AL FINAL DE CUENTAS: El municipio de Culiacán, capital de Sinaloa, gobernado por Antonio Valdés Palazuelos, solicitará un crédito por $428.3 millones a Banobras, cuenta con buenas referencias para obtenerlo. Sin embargo, ese municipio adquiere un compromiso muy elevado presuntamente para obras de infraestructura. Seguramente el crédito será liquidado, pero futuras generaciones serán las que paguen la decisión de este alcalde de lucirse con obras.
RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA: Bajo el liderazgo de Gerardo Rozanski, Unilever en México se comprometió a contribuir para una nutrición sustentable, y democratizar el acceso a alimentos saludables para una población en franco crecimiento. Al mirar al 2050 la población global ascenderá a 9,000 millones de personas, por lo que el desafío de poder alimentar a un mundo superpoblado es mayúsculo. El incremento de 2,500 millones de personas supone que en los próximos 40 años se necesitará más comida que toda la que se consumió en los pasados 10,000 años.