Nuevo Laredo, Tamps., 15 Mar.- Al menos 450 cubanos se encuentran varados en el municipio fronterizo de Nuevo Laredo en espera de que se resuelva su situación migratoria en Estados Unidos, luego de que la ley conocida como “Dry foot, wet foot” (Pies secos, pies mojados) concluyera el pasado mes de enero.
El alcalde de este municipio fronterizo, Enrique Rivas, refirió que los centenares de cubanos pasan la mayor parte del tiempo apostados en las cercanías de los cruces fronterizos, en espera de ser atendidos por autoridades migratorias y así definir su ingreso al vecino país del norte.
“Es un tema delicado, ya que la presencia de los cubanos se vuelve un problema social porque tenemos que apoyarlos, pero gracias a organizaciones civiles y religiosas podemos proporcionarles alimentos, ropa e incluso atención medica”, dijo.
En entrevista con Notimex, el edil destacó que los cubanos varados incluyen todos los grupos etarios y de ambos sexos.
“La mayoría son adultos, pero entre ellos se encuentran jóvenes, niños, adultos mayores hombres y mujeres”, añadió.
El munícipe destacó que es tanto el interés de los cubanos por ingresar a territorio estadunidense que, incluso, una mujer cubana dio a luz recientemente en el municipio de Nuevo Laredo a un niño.
“Ya registramos el primer nacimiento de un bebé de padres cubanos en territorio tamaulipeco por lo que tenemos en esta región a un cubano/mexicano, obviamente le brindamos todas las atenciones a la madre y al bebé, quien se encuentra en perfecto estado”, comentó.
Mencionó que de acuerdo a las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos, los procesos para el ingreso de cubanos ya no es el mismo con la llegada del nuevo presidente, por lo que presumió que los que no sean aceptados tendrán que regresar a su país, aunque advirtió la posibilidad de que algunos busquen donde arraigarse en territorio mexicano.
El edil indicó que por ser Nuevo Laredo una de las ciudades fronterizas con mayor dinamismo, es común la llegada de migrantes que buscan conquistar el sueño americano a través de esa frontera.
“No sólo mexicanos, sino de muchas nacionalidades tienen como ruta el municipio de Nuevo Laredo para internarse a Estados Unidos y en ocasiones se quedan en la frontera y echan raíces en esta zona”, dijo.
Señaló que a la fecha no se han registrado deportaciones masivas a través de su municipio, pero adelantó que el ayuntamiento se prepara para recibirlos y apoyarlos cuando esto suceda. “Vemos que la política de Estados Unidos va en serio en contra de los migrantes”, apuntó.
El alcalde reiteró que el ayuntamiento de Nuevo Laredo continuará apoyando a los migrantes con la finalidad de que se regresen a sus lugares de origen, pues de lo contrario, podría originarse una alteración en el desarrollo social de la comunidad.
En tanto, el congresista demócrata por el distrito 28 de Texas, Henry Cuéllar, precisó que tan sólo en el último año fiscal arribaron unos 34 mil 658 cubanos a través de la frontera que une a las ciudades de Nuevo Laredo y Laredo, Texas.
Señaló que la política de Estados Unidos que permitió por más de dos décadas a los cubanos hacerse ciudadanos estadunidenses si lograban pisar tierra firme concluyó el pasado mes de enero, por lo que a partir de esa fecha queda restringido el acceso para esa población.
“La política de pies secos, pies mojados proporcionó a los cubanos un estatus migratorio especial sin precedentes y que ningún otro grupo de personas tiene”, concluyó.
Notimex