La vocal ejecutiva del Instituto Nacional Electoral (INE) en Querétaro, Ana Lilia Pérez Mendoza, recordó que se multarían a aquellos sacerdotes y miembros de distintas religiones, que promueven el voto en favor de algún candidato o partido político.
Ello, luego de que el representante de Morena ante el consejo local, Manuel Bernabé Bautista García, denunció, en la última sesión ordinaria de este órgano local electoral, que se ha tenido conocimiento de que miembros de cultos religiosos, como el católico, han hecho llamados a los feligreses para votar por ciertos partidos políticos.
Al respecto, la vocal recordó que las sanciones económicas van desde 10 mil hasta más de 50 mil pesos, para quienes sean sorprendidos y denunciados ejecutando actividades de coacción del voto.
“Se impondrán de 100 hasta 500 días multa, a los ministros de culto religioso que, en el desarrollo de actos propios de su ministerio, o a quien en el ejercicio del culto religioso, presionen el sentido del voto, o induzcan expresamente al electorado a votar o abstenerse de votar por un candidato, partido político o coalición”, mencionó.
Pérez Mendoza pidió a la población reportar y denunciar cualquier acto que recaiga en un delito electoral, presentando las evidencias y constancias necesarias para su correcto procesamiento. Esto, ante la Fiscalía Especializada en materia de delitos electorales, en el número 800 8 33 72 33; o bien, de manera digital, en la página pública de internet de este organismo.
“La persona que sea testigo y que pueda dar constancia de una situación de esta naturaleza es la que tiene que hacer la denuncia. Sin duda alguna, todos estamos en la posibilidad de cometer algún delito electoral”, refirió.
De manera general, Ana Lilia Pérez refirió que se han recibido denuncias en materia de colocación de propaganda, actos anticipados de precampaña y campaña; y el no reportar gastos a la unidad técnica de fiscalización.
Recordó que, una vez concluidas las campañas electorales, también se pueden constituir delitos electorales durante los tres días de “reflexión”, donde se suspende todo tipo de acto proselitista, que incluye los días 30 y 31 de mayo y 1 de junio; así como aquellos detectados durante la jornada electoral.