La afición lagunera abucheó y pidió en unánime la salida de Javier Aguirre.
Pero el “Vasco”, con toda su experiencia, contestó que ‘estamos en un país libre y la afición paga por un boleto’.
“No soy quien para juzgar a la gente y menos a la nuestra, la mexicana, y son libres y soberanos de manifestarse como quieran, y pagaron un boleto en un país libre y con libertad de expresión y manifestaron su inconformidad libremente y a partir de ahí no soy quien y no debo hacerlo”, dijo tras el 0-0 con Uruguay, en Torreón.
Aseguró que sintió que su equipo fue mejor que Uruguay, pero reconoció que se siguen quedando cortos al ataque.
“Fue un partido igualado a todas luces, y poco mejor nosotros en cuanto a números, tiros a gol, posesión de balón, pero la única que vale es el empate y no fuimos capaces de ganar y no fuimos superiores al rival”.
Agregó que le gustó la actuación de Obed Vargas y Gilberto Mora, quienes entraron de cambio.
“Muy contento con el debut de Obed Vargas y muy contento con Mora, un chico que no le quema la pelota, hace todo bien”.
El martes, México enfrentará a Paraguay en donde el Tricolor y Aguirre buscan ganar luego de cinco juegos sin ganar.
Edson Álvarez estalla contra la afición mexicana
La Selección Mexicana vivió una noche incómoda en su regreso a Torreón, Coahuila. Lejos de recibir un respaldo incondicional, la afición local no quedó conforme con el funcionamiento del equipo y lo hizo saber desde el silbatazo inicial, generando reacciones que llegaron hasta el vestidor.
Uno de los más molestos fue Edson Álvarez. El mediocampista del Fenerbahce, visiblemente frustrado, lanzó un comentario irónico que captó la atención de todos mientras caminaba rumbo a los vestidores: “Qué lindo es estar en casa, eh. Qué lindo es estar en casa”. Su semblante serio y la manera en que lo dijo dejaron claro que el descontento en la tribuna no pasó desapercibido para los jugadores.
El Estadio TSM vivió un ambiente dividido desde temprano. Parte del público abucheó debido a la decisión de no arrancar con el portero Carlos Acevedo, uno de los futbolistas más queridos en la región lagunera. A esto se sumaron cánticos como ‘Fuera Vasco’, además del polémico grito homofóbico que reapareció en algunos sectores y generó incomodidad tanto dentro como fuera de la cancha.
Raúl Jiménez también se molestó
Edson no fue el único que expresó su inconformidad. Raúl Jiménez, delantero histórico del Tricolor, también compartió su decepción al finalizar el encuentro. Con evidente molestia, señaló que lo vivido en Torreón no corresponde al apoyo que un equipo nacional debería recibir cuando juega en México.
Lo que deja tristeza es jugar de local y que te abucheen, que ‘fuera Vasco’, que le griten al portero. Eso es lo que deja tristeza la verdad”, afirmó Jiménez, subrayando que situaciones así podrían explicar por qué la Selección suele disputar tantos partidos en Estados Unidos. Sus palabras fueron un llamado de atención tanto para la afición como para el propio entorno del equipo.
Lo cierto es que el resultado, sumado al bajo desempeño mostrado, terminó por encender los ánimos. Aunque se trató de un partido amistoso, los aficionados esperaban una mejor versión del conjunto mexicano en una sede que pocas veces recibe juegos del Tricolor.
Tras el empate sin goles ante Uruguay, la Selección Mexicana ya prepara su siguiente compromiso en territorio estadounidense. El equipo dirigido por Javier Aguirre volverá a la actividad el martes 18 de noviembre, cuando enfrente a Paraguay a las 19:30 horas (tiempo del centro de México) en el Alamodome de San Antonio, Texas.
Será otro examen importante rumbo al Mundial 2026, especialmente después de la tensión vivida en Torreón. El Tri buscará recuperar sensaciones y, sobre todo, reconectar con una afición que, por ahora, mantiene opiniones divididas.





