El vocero de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, informó que la renuncia del obispo Fidencio López Plaza aún se encuentra en proceso de revisión en el Vaticano, luego de que fuera presentada en abril pasado al cumplir los 75 años de edad, conforme lo establece el derecho canónico.
“Este es un proceso que inicia (…) al cumplir los 75 años de edad, se hace la renuncia. El obispo, de una manera muy específica, le pide al Santo Padre, que es la autoridad que lo nombró obispo, que él renuncia al ejercicio de dirección de la iglesia”, explicó Lara Becerril durante una rueda de prensa.
Agregó que la carta de renuncia “ya está en el Vaticano” y que, por el momento, se espera la respuesta oficial del Papa para aceptar la dimisión y nombrar al sucesor. “Esperamos que en algún momento el Santo Padre le acepte la renuncia y entonces el Santo Padre nombre al siguiente obispo, que será el obispo número 11 aquí en nuestra diócesis, porque el señor Fidencio es el número 10”, señaló.
El vocero precisó que el proceso se ha visto influido por cambios recientes dentro del Vaticano. “No hay que olvidar la coyuntura que significó la muerte del Papa. Fue coincidente (…) apenas en estos días pasados el Papa León, él estaba encargado en la oficina del Vaticano de nombrar los obispos. Entonces apenas ha nombrado su sustituto en la oficina y apenas tiene un par de semanas que ha sido nombrado”, detalló.
Finalmente, explicó que la designación de un nuevo obispo depende de un procedimiento interno en el Vaticano, en el que se consideran las características pastorales y las necesidades de la diócesis. “Para nombrar un obispo de una diócesis, en primer lugar, se ve cuál es su camino pastoral, cuáles son sus necesidades pastorales, y después se busca al sacerdote o al obispo que responda a las necesidades de esta iglesia”, dijo.
Hasta el momento, no hay una fecha determinada para que el Papa acepte la renuncia ni se ha confirmado la existencia de candidatos para suceder al actual obispo de Querétaro.








