A 24 horas de que se cierren los carriles centrales en 5 de Febrero para el retiro de los cinco puentes y el inicio de lo que será el Paseo 5 de Febrero, el gobernador Mauricio Kuri reconoció que vienen meses muy complicados por las obras. Al refrendar su compromiso para entregar el Paseo antes de que culmine el 2023, el mandatario exhortó a los queretanos a planear sus traslados, salir con tiempo y de ser posible, compartir el auto. Apeló a la cultura cívica para hacer más llevaderos los próximos meses “vienen meses muy complicados. Pero nos van a dar lustros de beneficios. Así como el patrimonio de una familia se construye con trabajo, paciencia y empeño. Así se construye nuestro patrimonio colectivo que es Querétaro”.
Kuri González, advirtió que no ha sido sencilla la decisión de intervenir la arteria más importante de la capital por donde diariamente trasladan más de 200 mil usuarios del transporte público, 120 mil automóviles y decenas de miles de peatones. Aseveró que lo que no se hizo durante décadas, llevó a tener la arteria colapsada. Advirtió que el futuro de la entidad no puede frenarse por un embotellamiento e invitó a la la población queretana a ser paciente y colaborar durante la segunda etapa de la construcción de Paseo 5 de Febrero. Recordó que los puentes de la vialidad, se levantaron en los 80s cuando la población no superaba los 300 mil habitantes en la zona metropolitana “Hoy son más de un millón quinientas mil personas, lo que ha representado más tiempo de traslado. Un tiempo que, en lugar de estar atorados en el tráfico, pudo ser destinado a estar con la familia, los amigos, o a producir”.
El mandatario estatal manifestó que elevar a Querétaro al siguiente nivel conlleva hacer lo que no se hizo en lustros, aunque ello implique sacrificios, motivo por el que apeló a la cultura y el respeto de la sociedad queretana, a la que invitó a mostrar su civismo, educación, tolerancia y empatía con los demás.
En un video dirigido a las y los queretanos, el mandatario estatal detalló que la segunda etapa del proyecto contempla cinco reingenierías, en las que se trabajará de manera simultánea, así como pasos vehiculares superiores y deprimidos, carriles exclusivos para transporte público y la construcción de un entronque. Detalló que se trata de casi seis kilómetros de una nueva movilidad que funcionará para peatones, ciclistas, usuarios de autobuses y automovilistas. Su conclusión dijo, significará un antes y un después en la Zona Metropolitana y un mejor porvenir para las familias queretanas. El titular del Poder Ejecutivo estatal reconoció que los meses que durará la obra serán difíciles, pues se trastocará la vida cotidiana de todas y todos; los traslados, indicó, serán más complicados y se tendrá que invertir tiempo y paciencia. No obstante, afirmó que la incomodidad que generará será proporcional a la magnitud del proyecto.