Los senadores republicanos de Estados Unidos impulsaron el viernes de madrugada el nombramiento del secretario de Salud propuesto por el presidente, Donald Trump, en una difícil votación que quedó marcada por las divisiones de partido.
La votación, por 52 votos a favor y 47 en contra, implica que el representante por Georgia Tom Price dirigirá el Departamento de Salud y Servicios Humanos. El republicano ayudará a liderar la campaña de su partido para eliminar la reforma sanitaria del expresidente Barack Obama, y es probable que el gobierno elabore normativas para limitar la actual ley sanitaria.
La de Price fue la cuarta votación disputada seguida para un secretario del gobierno de Trump. Por lo general, las disputas partisanas en el Senado a la hora de nombrar a puestos de gobierno son poco comunes. Pero las primeras semanas de mandato de Trump han ofrecido poca cortesía entre los dos grandes partidos.
Price es un veterano miembro de la Cámara de Representantes y cirujano ortopeda, al que los republicanos consideran como un candidato con conocimientos para el puesto. Los demócratas, por su parte, afirman que se deja llevar por la ideología y sus medidas arrebatarían la atención sanitaria a muchos estadounidenses.