Ve el Obispo de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, un escenario esperanzador para que las cosas cambien, tras las elecciones del domingo, pero –advierte- no se trata solamente de combatir la corrupción sino de garantizar un mejor futuro para las familias y garantizar seguridad, paz y justicia.
Entrevistado antes de partir a la Sierra, en donde hoy arranca la primera fase de la Peregrinación al Tepeyac desde Neblinas, el pastor de la grey católica habla a PLAZA DE ARMAS, El Periódico de Querétaro, sobre la tradición católica y el resultado de los comicios.
A la pregunta de si hay que dar al Peje lo que es del Peje y a Dios lo que es de Dios, responde que no, que el Presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá que ver por el bien común de todos los mexicanos y respetar, como lo ha ofrecido, las creencias del pueblo.
Cordial, como siempre, recibe Faustino Armendáriz a los reporteros en su casa de las calles de Reforma, en el Centro Histórico, rodeado de imágenes religiosas y sus fotografías con tres Papas: Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco.
En la sala parece haberse detenido el tiempo porque se mantienen los mismos muebles de los anteriores obispos, Alfonso Toriz Cobián y Mario de Gasperín.
Al actual, el primero en hacer la peregrinación queretana, desde hace ocho años, le gusta estar cerca de los feligreses y goza yendo a la Sierra. Su viaje de ayer, para dormir en Agua Zarca, es el número 79 de su obispado.
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LA PERE, EJEMPLAR
PLAZA DE ARMAS: Hoy inicia la Peregrinación.
OBISPO DE QUERÉTARO: Ya es toda una tradición. La 59 de mujeres y la 128 de varones. Creo que es una extraordinaria tradición y también una manifestación de fe, como siempre lo he dicho, ejemplar para los católicos de México, porque solamente el que camina entre los peregrinos se da cuenta y valora más la Peregrinación, no desde fuera, es una visión ni siquiera periodística. Es una visión vivencial. Y yo sigo cada vez más admirado y motivado a participar, caminar con ellos, peregrinar con ellos por la dosis extraordinaria de fe que comparten a quien peregrina con ellos. Querétaro es un estado y una diócesis privilegiada por este tesoro de religiosidad popular que no solamente la conserva sino que la acrecienta. Es mi octavo año caminando.
PDA: ¿Llegan a concentrarse más de 100 mil queretanos, entre peregrinos y familiares?
OBISPO: En cada eucaristía. Primero la de mujeres, después la de hombres que llega más tarde, pero en la mañana tenemos una Basílica llena con los ciclistas.
PDA: Una manifestación de fe a prueba de siglos.
OBISPO: La fe está y estará siempre. Creo que la fe no se desgasta, no se acaba, porque al final de cuentas la fe es un don de Dios, un regalo de Dios que estamos recordando que hay que pedirla de manera permanente porque sino entonces se desgasta y se acaba. Dios sí responde a esto y sobre todo en las personas más humildes, las gentes más sencillas, con una fe sencilla, esto se manifiesta. Es un ejército de peregrinos católicos que poco a poco vamos evangelizando, que vamos luchando para que vivan ese encuentro personal con Jesús y poco a poco vamos quitando algunas irregularidades de la Peregrinación y que vamos luchando por ello, no se puede en poco tiempo, sobre todo esas inercias de quienes caminan adelante. No es peregrino quien se adelanta, es un caminante que quiere llegar primero, quiere ganar los mejores lugares, quiere bañarse primero, comer primero. La Peregrinación es un camino de solidaridad, de fraternidad. No es un camino individualista, egoísta
PDA: ¿Qué matices tendrá su mensaje para este año?
OBISPO: Este año hemos enviado ya algún mensaje, especialmente a los sacerdotes. Uno de los matices que yo quiero resaltar es la participación de los sacerdotes en la Peregrinación. Yo les he pedido a todos que regalen una jornada a los peregrinos, que son sus peregrinos, porque en la Peregrinación caminan fieles de todas las parroquias y el oficio de los sacerdotes es ofrecer el sacramento de la confesión a lo largo del trayecto. Entonces, les he pedido que estén muy cercanos y ojalá y se acreciente la participación sacerdotal. Así lo creo, así lo espero.
MADUREZ DEL PUEBLO
PDA: ¿Cómo ve al país, señor Obispo, de cara a la elección del pasado domingo?
OBISPO: Veo un país que ha actuado con madurez. Un país que consolida la democracia y afronta el desafío de la elección, porque es un desafío el elegir. Y dentro de todo pienso que este desafío tiene un gran ingrediente de esperanza de que las cosas cambien. No solamente decir que no haya corrupción, sin también que las familias tengan un mejor futuro, que haya más empleos para que no se vayan tantos hermanos, sobre todos jóvenes, a Estados Unidos, que haya mejores sueldos y más trabajo en las familias, que haya más oportunidades para los jóvenes y para quienes quieren crecer académicamente. Porque el embudo se cierra cuando terminan la secundaria y la preparatoria, incluso la primaria. Parece que el escenario es esperanzador en general para todos los ciudadanos, pero al mismo tiempo, lógicamente, quienes no eligieron por esta opción, me imagino que se unen a esta esperanza pero al mismo tiempo estando muy pendientes a las iniciativas que afecten las convicciones y los valores del pueblo, que es un pueblo religioso, católico.
PDA: ¿Al Peje lo que es del Peje y a Dios lo que es de Dios?
OBISPO: No. El Presidente tiene que ver por el bien común y tiene que estar muy pendiente también, sin distingos de ningún tipo, de –él mismo lo dijo- las creencias del pueblo mexicano y ser muy respetuoso.
ESPERANDO LO LOCAL
PDA: ¿Querétaro?
OBISPO: ¡Querétaro! Todavía estamos esperando que se consoliden los procesos. Recuerden que están los famosos conteos y esperemos que, en justicia, se den los conteos así justos y que quienes hayan o hayamos elegido los queretanos salgan para realizar este servicio, porque es un servicio, más que un privilegio. Es un privilegio también servir pero no con intereses mezquinos, sino que tiene que ser un servicio por los más pobres especialmente, porque son los más y tienen que tener una visión de mucha sensibilidad para todos los ambientes de pobreza y para todas las situaciones de vulnerabilidad que hay en nuestro estado, recordando que uno de los grandes retos en la actualidad, y que Querétaro no puede estar al margen, es el tema de la seguridad, el tema de la paz, una paz que también va unida a la justicia, a realizar un gobierno con justicia.
PDA: ¿Algo que dese agregar, don Faustino?
OBISPO: Que Dios bendiga a Querétaro, Dios bendiga a México y les invitamos a la Peregrinación, a acompañarnos. Los queretanos, creo, que como los árabes van una vez en la vida a La Meca, los queretanos deben también no recorrer toda la Peregrinación (si lo hacen mejor) pero al menos hacer una jornada, ir caminando con su pueblo en la Peregrinación.
POR: SERGIO ARTURO VENEGAS ALARCÓN Y FERNANDO VENEGAS RAMÍREZ