Rubén Cortés
Quien era director cuando desfalcaron 20 mil millones en Segalmex despacha en Segob. Pero el gobierno encarceló al funcionario que descubrió el desfalco, cuando sustituyó a uno a quien un juez dio suspensión definitiva contra su orden de captura.
Una justicia de locos. Como Garduño, el director de Migración: está imputado porque fueron quemados vivos 40 migrantes en una celda, pero el gobierno informó ayer que Garduño puede seguir al frente de Migración: “No le quita tiempo”, fue el anuncio.
Veamos el caso de Jesús Óscar Navarro Gárate, detenido el martes por la Fiscalía General de la República, por el caso de Segalmex:
• Fue nombrado director de Finanzas de Segalmex en sustitución de René Gavira, quien había sido despedido por estar involucrado en la malversación de 142 millones de pesos; mientras ejercía el cargo, a las órdenes de Ovalle.
• Curiosamente, la malversación de los 142 millones de pesos fue descubierta por el hoy detenido, pero (más curiosamente) el descubridor se encuentra hoy preso; mientras el supuesto malversador no tiene problemas.
• Más aún: a René Gavira, el juez Enrique Vázquez le suspendió una orden de captura por delincuencia organizada, lavado y peculado, por la compra ilegal de 100 mil títulos bursátiles de 100 millones de pesos de Segalmex.
A todas estas, el presidente que dice que no es tapadera de nadie en el caso Segalmex. Ah, pero promovió a Ovalle a un alto puesto en Gobernación. Aunque, eso sí, aclaró que “aquí no hay impunidad para nadie”.
Y, sí, es verdad que hay 38 denuncias en la Fiscalía por el robo del siglo en Segalmex. Pero también lo es que, los tres más altos mandos durante el desfalco, no son molestados: Ovalle, Gavira y Carlos Antonio Dávila Amerena.
Este Dávila Amerena era director de Asuntos Jurídicos. Sin embargo, el juez Gregorio Salazar se negó a procesarlo por “falta de pruebas” en la pérdida de 142 millones 440 mil 883 pesos. Pareciera que, mientras cerca de Ovalle se estaba, más la libran.
Hasta ahora, a quien peor le ha ido a Jesús Óscar Navarro Gárate, quien, paradójicamente, fue quien prendió los focos rojos del robo del siglo, que es el mayor desfalco de dinero público en la historia de México.
Y, también, al empresario Fernando Hiram Zurita Jiménez, quien supuestamente dirigía la empresa Servicios Integrales Carregín, responsable del fraude mediante la cual fue fingida la venta de siete mil 840 toneladas de azúcar a Segalmex.
A Zurita Jiménez, un juez federal vinculó a proceso el pasado tres de abril, pero la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada tiene órdenes de aprehensión contra 22 personas más vinculadas a los desvíos millonarios.
Pero unos son más iguales que otros.