Un médico se declaró culpable este miércoles de haberle proporcionado ketamina a Matthew Perry en el mes previo a la muerte por sobredosis del actor de Friends.
El doctor Salvador Plasencia, de 43 años, se convirtió en el cuarto de cinco acusados en relación con el caso en aceptar su culpabilidad.
Compareció junto a su abogado ante la Jueza Sherilyn Peace Garnett en el tribunal federal de Los Ángeles y admitió su responsabilidad en cuatro cargos de distribución de ketamina.
Plasencia iba a ser juzgado en agosto, pero el mes pasado firmó un acuerdo con la fiscalía para declararse culpable. A cambio, se retiraron tres cargos adicionales por distribución de ketamina y dos por falsificación de registros.
Los fiscales aclararon en la audiencia que Plasencia no fue quien vendió a Perry la dosis que causó su muerte. En los documentos del caso, Perry aparece identificado únicamente como “víctima MP”.
Aunque los cargos podrían acarrear una sentencia máxima de 40 años de prisión, se espera que la condena sea menor.
Plasencia ha estado en libertad bajo fianza desde poco después de su arresto en agosto y podrá permanecer libre hasta su audiencia de sentencia, programada para el 3 de diciembre.
A la salida del tribunal, Plasencia no hizo declaraciones a los medios.
La única acusada que no ha llegado a un acuerdo con la Oficina del Fiscal de Estados Unidos es Jasveen Sangha, señalada como una presunta traficante de drogas apodada la “Reina de la Ketamina”.
Según los fiscales, fue ella quien vendió a Perry la dosis letal. Su juicio está previsto para el próximo mes. Se ha declarado no culpable.
De acuerdo con los testimonios de coacusados y los documentos presentados, Plasencia suministró ilegalmente una gran cantidad de ketamina a Perry comenzando aproximadamente un mes antes de su fallecimiento, el 28 de octubre de 2023.
Uno de los coacusados indicó que Plasencia llamó a Perry un “idiota” en un mensaje de texto, asegurando que podía ser explotado por dinero.
El asistente personal de Perry, un amigo y otro médico ya se declararon culpables el año pasado y cooperaron con la fiscalía para fortalecer el caso contra los principales implicados: Plasencia y Sangha. Aún no han sido sentenciados.
Matthew Perry fue hallado sin vida por su asistente, Kenneth Iwamasa. El forense determinó que la causa de muerte fue intoxicación aguda por ketamina, una sustancia usada como anestésico quirúrgico, pero que también se aplica en tratamientos alternativos contra la depresión.
Aunque Perry recibía ketamina como parte de un tratamiento autorizado, comenzó a buscar dosis adicionales fuera del control de su médico habitual.
Plasencia admitió en su declaración de culpabilidad que otro paciente lo puso en contacto con el actor y que, a partir de ese momento, le proporcionó 20 viales (100 mg), pastillas de ketamina y jeringas. También reclutó al médico Mark Chavez para ayudarlo a distribuir la droga.
“Me pregunto cuánto pagará este idiota”, escribió Plasencia a Chavez, según los documentos judiciales. Tras venderle la droga a Perry por 4 mil 500 dólares, Plasencia le propuso a Chavez seguir con el suministro para convertirse en el “recurso habitual” del actor.
Matthew Perry, de 54 años, luchó durante años contra la adicción, incluyendo el tiempo en que alcanzó la fama mundial como Chandler Bing en Friends, la exitosa comedia de NBC emitida entre 1994 y 2004.
