De enero a octubre, a tasa anual, la actividad industrial del País no solo sumó su segundo descalabro en fila, sino que contabilizó su peor resultado en un quinquenio, puesto que el indicador fue impactado por la pandemia en 2020 y se hundió en ese entonces 10.55 por ciento.
Y es que en los primeros 10 meses de 2025, la producción industrial retrocedió 1.54 por ciento anual desde un descenso de 0.30 por ciento en el año anterior, de acuerdo con cifras desestacionalizadas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los cuatro grandes componentes del sector industrial mexicano observaron reducciones en el lapso referido, encabezados por la minería, con una contracción de 7.35 por ciento, debido a las variaciones negativas en los servicios relacionados con la minería, la extracción de petróleo y gas, así como la minería de minerales metálicos y no metálicos, excepto petróleo y gas.
A la minería, le siguió el declive anual de 2.29 por ciento en la construcción, ocasionado principalmente al desplome de la construcción de obras de ingeniería civil de 26.26 por ciento, un movimiento que no pudo ser compensado por los aumentos en edificación y los trabajos especializados para la construcción de 3.38 y 1.67 por ciento, en ese orden.
La generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final descendió 0.72 por ciento anual, al igual que las industrias manufactureras 0.38 por ciento.
Al interior del sector manufacturero 15 rubros bajaron su producción y seis lograron incrementos.
La fabricación de prendas de vestir figuró entre los rubros con peor resultado en los primeros 10 meses del año, con una contracción de 6.89 por ciento anual, y otras industrias destacaron con un repunte de 26.75 por ciento.
En México, a tasa anual, el sector industrial sumó su octavo decremento, ya que cedió 0.70 por ciento durante octubre frente a variaciones mixtas entre los rubros que lo conforman.
