DESDE LOS BALCONES
El tener una deuda externa de poco más de 103 mil millones de dólares, la mayor parte centrada en PEMEX, es la peor contradicción interna e internacional a que nuestro país se haya visto enfrentado.
¿Desde cuando viene ese absurdo financiero nacional e internacional? Todo surgió desde el momento que se apostó a la exportación del petróleo y a sus cuantiosas divisas, que arrastraron todo el comercio al referente de valor dólar, donde el dividendo internacional de esa cuota de ganancia significó más que plusvalía, (valor trabajo) renta de los fundos petroleros que, luego, fueron penetrados y apropiados por la inversión de capital externo, no reproducción del propio capital, el que además fue despilfarrado por la derecha, de un signo y otro, por el poder en turno.
Confundimos capital numerario con divisas. Se regó dinero por el país, principalmente a las élites oportunistas “dirigentes”, más figurativas que dirigentes de todas las entidades de la república.
El poder presidencial confundió gasto con desarrollo. México enajenó sus fuerzas productivas a una real o ficticia clase privada, misma que se endeudó con endeudamiento externo, por el mismo “valor” asignado a las empresas. Pudiera decirse que enajenamos nuestro subdesarrollo y el potencial productivo del mismo a la compra de deuda y se continuó operando para sufragar el valor “presente” de esas empresas vendidas, ¿eso dice Carlos Urzúa? Y en ese círculo vicioso del capital ficticio en que nos hundimos y hundimos al país. Pregúntele a Carlos Salinas, a Zedillo, sobre todo a Fox y a Calderón, pero más todavía a Peña Nieto, ¿cómo hicieron posible este desastre y esta bancarrota del país?
Todavía hay gobernadores en los Estados de la República, que siguen insistiendo en obtener financiamiento para hacer banquetas, puentes, jardines, alumbrado, contratos a largo plazo para recolectar basura y lujos efímeros, muchos gastos cupulares de los funcionarios en turno.
Las divisas del petróleo que llegaron a desprenderse de los altos precios del mismo, (más de 100 dólares barril) y llegamos a producir 3 millones de barriles diarios y a exportar dos terceras partes del mismo. Vicente Fox fue uno del ex presidente más responsable de esta catástrofe, de inyectarle gas a Cantarell para que produjera más y más rápido petróleo por día.
Las empresas españoles se volcaron sobre México, empresas postfranquistas que habían hecho antes lo mismo en España. Ellos “compraron” los bancos, realizaron inversiones de papel hasta romper todos los circuitos internos de nuestra economía. NO faltaron mexicanos que les secundaran. Todavía los hay y se asocian parasitariamente con quien sea.
¿Qué poder de negociación le dejaron a la Secretaría de Hacienda? ¿Al régimen presidencial nuestro, a los Estados y al pueblo tomado como rehén del narcotráfico, hundidos y masacrados por delincuentes y policías federales? Pregúntele a Felipe Calderón, ¿dónde están los hoteles flotantes que compró en España? ¿En que quedaron la compra de acciones a Repsol, hasta por mil 700 millones de euros? Todo eso y más está acumulado en la esperpéntica deuda externa, mayor que la que tiene Italia y la propia España, por caso.
En la SHCP SE VIVE UN COMPLEJO DINERARIO ABSURDO cifrado, por ejemplo, en que Luis Videgaray sacaba al mercado tantos más cuantos miles de millones de dólares en Bonos a cuenta de Pemex. ¿Dónde quedó ese dinero? ¿En qué se aplicó ese capital ficticio?
La SHCP ES UNA CANCHA PODRIDA Y LLENA DE AGUJEROS. ¿Qué SECRETARIO PODRA CAMINAR POR AHÍ? ¿Quiénes elaboraron en la SHCP el documento de la Reforma Energética, que ni siquiera tuvo una exposición de motivos? Pero ¡que buenos somos para insultar a diario al Presidente Andrés Manuel López Obrador y cargarle las tintas en su tardío arribo al poder!
¿Cuánto y en qué se invirtió en el Aeropuerto de la Ciudad de México, cuando Fox y ahora, sin que México pueda hacerse de esas rentas por el uso del mismo, puesto que ya fueron enajenadas por esos que se amparan y se lamentan de no haber podido saquear más de lo mucho que ya han hecho.
¿Qué Secretario de Hacienda, podrá sacar de la barranca al país endeudado hasta los codos y con qué orientación económica? ¡Ah, pero como nos preocupa, que en Baja California, alguien quiera gobernar un sexenio completo y no dos años, tumbados a la derecha panista autora y firmante del Fobaproa, del IPAB, de Oceanografía y de la costosísima reforma energética que acaso ya cotiza, como meras concesiones, en las bolsas de valores del mundo.
¿Qué Secretario de Hacienda se ha planteado estos problemas y cuántos gobernadores se preocupan por esto? ¡Qué trabajo cuesta entender la historia económica mundial y la nuestra! ¿En qué parte se enseña? Ni locos que estuvieran en el ITAM y en muchas instituciones de nuestro país. ¿Verdad licenciado Carlos Urzúa, que los libros no teorizan, ni actúan por si mismos en la cabeza de nadie?