DESDE LOS BALCONES
Que lo entiendan quienes quieran y puedan.
Quitarle al Estado Mexicano, el control territorial, económico y político es uno de los tantos objetivos del poder de los distintos agrupamientos de ese mundo informal de riqueza que se mueve al margen y dentro de los procesos productivos de la economía nacional.
Sólo así se explica la alternancia del PRI al PAN. ¿Por qué es así? Porque la segunda fuerza aludida, ante la hegemonía prolongada de los grupos de la burguesía pos revolucionaria, no tuvo otra alternativa que pactar con esa emergencia económica, electoral y política; y esto se vió sobre todo en Estados como Baja California, Jalisco, (especialmente en Guadalajara) la región de la Laguna, en donde los flujos de dinero pudieron confundirse y hasta valorizarse con el resto de las actividades y sectores.
Esto que se dice no es ninguna novedad, sucedió en Chicago, en Nueva York, en Milán, Roma y en Palermo donde se estructuraron las grandes mafias que luego penetraron todos los circuitos de la economía europea, donde se asentó y se hizo del poder la democracia cristiana, como forma de frenar el avance de los partidos comunistas, principalmente el Italiano y el francés, que habían participado en la formación de la segunda y tercera internacional.
El imperialismo es ante todo pragmático, frente a sus necesidades de mercado y de financiamiento externo, por eso no se iba a empeña en una guerra prolongada de bajo perfil y que se nutre de los propios procesos de marginamiento social y económico de grandes las grandes masas.
México, vive una historia parecida, pero diferente y específica, ligado el narcotráfico y al desmantelamiento de la economía estatal en favor de particulares y aún de las trasnacionales.
El desmantelamiento de los más de 27 mil ejidos en el país, abrió el mercado de la tierra y su posterior edificación inmobiliaria a esos dineros y aún a los rendimientos bancarios; veamos si no eso acontece en casi todos los centros turísticos del país y su posterior ascenso inmobiliario, como en Veracruz Puerto, Coatzacoalcos, Minatitlán que con las inversiones petroleras primero, luego con su desmantelamiento abrieron grandes brechas a la especulación de todo tipo, que propiciaron la acción y la penetración de estos capitales dinero.
Jalapa misma, ciudades como Orizaba, Córdoba y demás concentraciones adyacentes fueron pasto de estas “inversiones” y la derecha asentada primero en Veracruz, fue tomando residencia en casi todos los municipios de esta enorme entidad clave en el desarrollo y control político del país.
Recuérdense los episodios de Cotaxtla, la postulación de familiares y aliados, por parte del PAN, de gente ligada a Cirilo Vázquez Lagunes, luego asesinado en Acayucan y el poder de otros grupos ganaderos, poder que luego se incrustara con estos mismos dineros y la renta acrecentada de la tierra.
Pero este proceso se halla en su fase final, aunque no lo entiendan así los panistas y otros partidos que se confabularon con gente del tipo de Miguel Angel Yunez, Diódoro Carrasco y personajes mil articulados anteriormente dentro de las filas mismas de vieja Secretaría de Gobernación.
Es cuento y novela negra de nunca acabar, el pretender reseñar a detalle las empirias políticas de que se valieron las fuerzas emergentes de la derecha en Guanajuato, en Michoacán con la riqueza del aguacate exportado y su nutrida emigración, así como en la ordeña de los ductos que atraviesan la república entera y de cuyos dividendos se nutren de la rentabilidad de esas “inversiones” que, de otra manera flotarían en su propio vacío.
Ahora viene la cuestión internacional de la seguridad y la valorización del capital mundial. Es aquí donde al parecer rebotaron esos grupos, al pretender condicionar a sus exigencia subalternas y de especulación particular el ámbito de ampliación internacional de este mismo capital.
Estos grupos y sus aliados políticos no pueden imponerse, ni conviene que lo hagan con el Estado Mexicano que, al fin y al cabo, sirve de soporte y relación histórica entre EU y a México.
¿En que se equivocaron García Luna, Calderón y Vicente Fox, entre otros muchos aliados que tienen en algunas entidades? En pretender apropiarse competir con el capital petrolero mundial, convirtiéndose en rentistas directos, o subsidiarios de los fundos petroleros como Oceanografía y Oro Negro, done los dineros públicos y la deuda externa, al igual que el narcotráfico anidado en sus entrañas.
Malos tiempos se avecinan para la derecha toda mexicana y externa. Malos tiempos para especulación y la formación de capitales parasitarios, que luego suelen disfrazarse de acumulación originaria; pero como no leen ni estudian teoría política económica, las cosas les resultarán tremendamente adversas lo quieran o no reconocer sus aliados y amigos de la frontera norte y sur de nuestros país. Estaremos a la espera de mayor y más abundante información de la muy poca que escape a los procesos judiciales de allá cerca del Río San Lorenzo, en Brooklyn