DESDE LOS BALCONES
¿Cuántas campañas desplegó el porfiriato contra las comunidades indígenas de norte del país y en qué terminaron?
A raíz del episodio de Culiacán, se ha desatado toda una epidemia de sabiondos tácticos y grandes, improvisados estrategas, de LA FORMA de conducir la lucha contra el crimen organizado, como si bastaran esquemas mentales, bien o mal diseñados, para acertar dentro de una determinada realidad social, de que convenga o no, forma parte esta actividad que se nutre tanto de la riqueza, como de la pobreza social y la falta de desarrollo.
¿Algunos de estos diletantes se han formulado acaso, cómo y cuánto se produce en Sinaloa? ¿De qué tamaño es el PIB de la entidad y en manos de quienes se concentra esa riqueza?
Sinaloa tiene más y mejor tierra que cualquiera estado del centro del país y gran superficie de riego, pero tiene un PIB QUE NO ALCANZA LOS 4OO MIL MILLONES DE PESOS, CASI DEL TAMAÑO DEL QUERETARO Y MENOR QUE AGUASCALIENTES.
Su población alcanza casi los 3 millones de habitantes, pero el promedio DEL PIB per cápita ES DE APENAS 149 MIL 680 PESOS ANUALES.
Padece una deformación en su estructura productiva, como por ejemplo, el sector terciario todo (agricultura, ganadería, pesca, s. inmobiliarios suman el 12 %,) porcentaje parecido del total el sector terciario; pero se reporta un renglón ¡extraño! Otras actividades 42.8 % del PIB. DE ESTAS ACTIVIDADES QUE SUPERAN TODOS LOS TRES SECTORES, NO SE PRECISAN QUIENES Y COMO PARTICIPAN DE ELLA.
Por otra parte la Inversión externa directa apenas registra los 689 millones de dólares, el 2.1 % del total del PIB.
El valor de agricultura representa apenas 42, 310 mil millones de pesos; la industria 75,800 millones de pesos y por ninguna parte se registran datos sobre esas actividades desconocidas. Más un presupuesto estatal exiguo de apenas 56 mil millones de pesos y débilmente aplicado y peor redistribuido, si es que se admite esta categoría de la economía marginal.
Comparativamente, tanto el sector primario como el secundario son del mismo tamaño en valor producido, en tanto que el comercio está siete u ocho puntos arriba, frente a más del doble que representan esas actividades no definidas del 42 %.
Rusia por ejemplo fue el granero de la poderosa producción industrial de Inglaterra, a quien de paso surtía de leña; pero la Rusia Zarista era y fue un país feudal atrasado.
¿Cómo explicarse que Baja California y otras entidades, estén por arriba en su economía que Sinaloa? Esto se puede resumir en que Sinaloa que se constriñe a captar la plusvalía de la Industria de Jalisco y otras entidades mayormente industrializadas con quienes intercambia el valor de esas actividades desconocidas, además en el exterior del país vecino.
Sicilia, en Italia, podría darnos un panorama descriptivo, para poder explicarnos cómo las rentas de la tierra, en donde se engloban estas actividades no registradas, atoran el desarrollo y el crecimiento de la economía.
¿De qué sirven las miles de apreciaciones tácticas y estratégicas de cartabón, sobre la manera más conveniente de realizar tal o cual operativo delincuencial, si se desconoce el suelo social y político, histórico de Sinaloa, con una especificidad política única, que le viene desde los tiempos de la Colonización y del desarrollismo económico que dotara a esas tierras de grandes centros de almacenamiento de agua de los once ríos con que cuenta esa entidad?
Podríamos entrar en particularismos históricos políticos y económicos, pero no viene al caso pretender dar lecciones nadie, sobre cómo realizar o no operativos en contra de las bandas del crimen organizado. Ejemplo internacionales sobran, el autoritarismo fascista es el caso más ilustrativo de ello y también su fracaso rotundo hasta la fecha, una de cuyas causas radica en el monopolio de la propiedad de la tierra y su contraste como productor de plusvalía con la industria, tal y como se representaron en la Italia Meridional y Septentrional, además de la relación externa con países de mayor estructura y peso estructural.
Otro tanto ha acontecido en Colombia, tan hermosa y rebosante de recursos naturales, pero plagada del monopolio propietario de la tierra y los productos de ésta a la exportación.
¿Qué se ganan algunos con querer cargarle las tintas al Presidente Andrés Manuel López Obrador, por rechazar la fuerza relativa del Estado contra esas actividades y sus actores urbanos y semiurbanos?
El problema está en otro lado, pero el ruido y la confusión que se arma, tienen el propósito de sembrar el desencanto social que desde luego no a va a prender en ese suelo generoso del pueblo sinaloense, tan alerta y despierto a pesar de todo.