DESDE LOS BALCONES
El amazonas político de Brasil en crecendo
Algunos medios internacionales fingen equivocarse frente al fenómeno político popular del encarcelamiento fabricado e injusto de Luiz Lula Da Silva, dos veces Presidente de esa inmensa república, la más grande en extensión y en población, también en dulzura y estremecimiento musical que todos hemos escuchado y disfrutado con la humanidad entero que alienta desde sus raíces negras y esa mezcla de culturas que se enebrá en la prodigiosa novela de Joa GuImaraes Rosa y Jorge Amado.
El viejo canoso Lula de Silva acaba de pronunciar una de sus más sentidas arengas populares, la más sentida y profunda de todas las que se le conocen.
Con la alta responsabilidad histórica y política que se le conoce y se le reconoce en el mundo, Lula ha decidido entregarse y no comprometer a su clase, la clase trabajadora metalúrgica que le sigue y le apoya, y al sinnúmero de simpatizantes del pueblo brasilero que se manifiesta en todas las calles y plazas de ese inmenso territorio.
Lula ha decidido entregarse preso a la policía federal y continuar su defensa legal ante la causa injusta a que lo tienen compelido las jerarquías burocráticas del aparato judicial, cuyos capitostes responden, más que a la ley, a la consigna fascista a la que sirven y que pretende entronizarse, otra vez, en Brasil.
Las cosas no pararán en cárcel alguna, otros dirigente en Brasil y en el mundo entero han pasado por ahí. Existe un documento escrito en Praga, “Reportaje al Píe de la Horca”, de Julius FUCIK, preso y muerto bajo las órdenes del segundo hombre de la Gestapo destacado para aplastar la resistencia en esa nación de Franz Kafka, el autor de “Proceso”.
El río Amazonas es de un caudal en que cabrían todos los ríos de Europa, ¿exagero? Es el río más grande del mundo, como si arrastrara consigo todos los siglos que vieron surgir del Océano Pacífico a la cordillera de los Andes; ni el Misisipi, ni el Danubio, tampoco el Río Volga, tienen las dimensiones volumétricas de agua que circulan por el Amazonas, que nace entre la amazonía ecuatoriana y peruana, sin que se pueda precisar en punto exacto del torrente que cruza el Sudcontinente nuestro desde hoy se escribe la historia y el empuje de un pueblo y de su clase trabajadora.
Lula da Silva no está derrotado, ni lo estará aun estando preso.
Lula Da Silva en tanto viva y aún muerto será una guía de lucha y resistencia como pocas veces la ha visto el mundo, pero que se encuentra dispuesto a reemprender de siempre, desde el Sertón del Nordeste Brasilero, hasta el enorme pantanal que se anega y casi alcanza las dimensiones geográficas de Chihuahua, pero sin minas y quizá sin tanto arsénico para lavar el oro.
Hoy resurge la figura epopeyita encarcelada de Lula Da silva y el Sudcontinente entero se estremecerá bajo su empuje y su caudal popular.
No hay armas que puedan contener el despertar de todos los pobres a los que ayudó a tener un techo y poder comer carne, aunque fuera por un día, a esa masa ´población pobre que pulula a lo largo y a lo ancho de Brasil.
Les están cobrando otras cuentas a Lula da Silva, las cuentas de fundar un MERCOSUR, las cuentas de integrar un bloque de naciones que, como la India y Sudáfrica, aspiran a tener un lugar en el mercado mundial con precios en que se refleje el valor de la renta y la ganancia juntos, todos producto del trabajo de generaciones enteras y no de unos cuantos apropiadores del Estado, que resuma propiedades anónimas accionarias y acumulación de fortunas sin límites y a los que nunca va a alcanzar la “justicia” aliada al fascismo en turno. Viva Brasil. Viva Lula da Silva, Brasil y su Samba, Brasil y su Orfeo Negro, en la dura prueba de . la causa democrática y popular hoy a prueba en la historia.