- Posibles consecuencias del Grito Feminista
- En Querétaro los restos de Josefa y esposo
- El lunes rendirá su I informe Felifer Macías
- Los del Otro Querétaro, borrados en El Grito
Foto: Sergio Arturo Venegas A.
Doña Josefa
A fines de los 70 el maestro José Guadalupe Ramírez Álvarez, ilustre cronista y exrector de la UAQ, le pidió al presidente José López Portillo incluir el nombre de la Corregidora en el Grito de Independencia, a lo que accedió de buena gana.
Así fue.
De allá para acá siete mandatarios vitorearon a Josefa Ortiz de Domínguez desde el balcón central de Palacio Nacional junto con los clásicos de clásicos: Hidalgo, Morelos, Allende, Guerrero y otros hombres del Club de Toby de Dolores Hidalgo.
Hasta el lunes pasado.
Millones de mexicanos escuchamos a la primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo (no de Tarriba, por favor) estrenar -urbi et orbi- el nombre de soltera de la heroína más importante de toda nuestra historia: Josefa Ortiz Téllez-Girón.
No más de Domínguez.
Ya lo había adelantado Sheinbaum aquí en su visita del sábado. Habrá sorpresas, dijo, porque se tenía como personaje al Corregidor y por extensión el mote de Corregidora y, claro, el más que posesivo “de Domínguez”.
Bien por la jefa del Poder Ejecutivo Federal, peeero (me pregunto) ¿tendrá consecuencias en la nomenclatura nacional, con dos mil calles y más de 600 escuelas con el nombre registrado en los libros de texto?
Aquí eso aplicaría para el plantel ubicado en Zaragoza y Juárez además del auditorio “Josefa Ortiz de Domínguez” también llamado AJOD.
Sin problema la importantísima Avenida Corregidora de esta capital, el jardín en donde está la más bella estatua de la ciudad, el municipio presidido por Chepe Guerrero y el estadio mundialista al que Rafael Camacho Guzmán decidió llamar Corregidora valiéndole siete fregadas el Andamaxei (Gran Juego de Pelota en otomí) ganador del concurso nacional convocado por él para bautizar -Alvaro Rico diixit- el coloso del Cimatario.
En interesante predicamento nos ha puesto nuestra feminista presidenta (con A) para adaptarnos al realismo de género en esta tierra en donde doña Josefa encendió la antorcha de la libertad y para mayor gloria reposan sus restos y los del señor Domínguez en el Panteón de los Queretanos Ilustres.
Doy fe.
A diferencia de otros estados, en el nuestro aún pueden celebrarse las fechas históricas en paz. El gobernador Mauricio Kuri cumplió el lunes con la tradicional ceremonia para vitorear a nuestras heroínas y héroes.
Foto: Especial
Foto:Especial
¡Viva México!
Foto: Especial
-OÍDO EN EL 1810-
Ardidos.
Que los reventadores del “Otro Morena” además de fracasar en sus provocaciones del sábado, cuando la presidenta Sheinbaum los mandó callar, tampoco pudieron hacer nada la noche del lunes con El Grito.
Somos nada.
-¡PREEEPAREN!-
Los Gritos.
Aquí, a diferencia de otros estados que prefiero no recordar, sí se puede cumplir con las ceremonias cívicas con grandes concentraciones de ciudadanos, como quedó demostrado en estas fiestas patrias.
El Gobernador Mauricio Kuri y los presidentes municipales (además de delegados por todo el estado) rememoraron la gesta del 15 y 16 de septiembre de 1810.
Bueno, casi todos, porque el alcalde capitalino Felifer Macías tuvo lugar de privilegio en el balcón central de la Casa de la Corregidora, al lado del mandatario estatal.
Ojo, mucho ojo.
-¡AAAPUNTEN!-
Por cierto.
El presidente municipal de Querétaro, Felifer Macías, entregará su informe en sesión de Cabildo el próximo lunes, sin el acto multitudinario de otros años.
Las lluvias, ya sabe.
-¡FUEGO!-
Menos mal.
Y por aquello de los cambios de nomenclatura que puede generar el Grito de la Presidenta Sheinbaum, menos mal que no nos aplicó el nombre completo de la Corregidora de Querétaro: María Josefa Crescencia Ortiz Téllez-Girón.
¡Porca miseria!
