La directora del Instituto para Prevenir y Eliminar la Discriminación en el municipio de Querétaro, Teresa Borbolla Olivares, informó que se ha apoyado al menos a 12 personas en situación de calle, para que tomen tratamientos en Centros de Rehabilitación para Adicciones.
Esto, como parte de los programas que impulsa el Hogar de Transición “Cambiando Vidas”, que atiende a aquellos que no cuentan con hogar y familia, y que viven en las validades. Muchos de quienes llegan a solicitar el apoyo de pernocta, son instados a ser beneficiados, pues presentan en su mayoría consumo de sustancias y diversas adicciones.
En este sentido, la funcionaria precisó que actualmente, se encuentran ingresados tres usuarios de algún anexo, que podrían salir en marzo de 2024. El proceso de atención dura entre 6 y 7 meses. El beneficio es una beca que paga el gobierno capitalino, para el tratamiento.
“Los que tienen un consumo con dependencia crónica a sustancias, se les ofrece la opción de que formen parte de un programa de rehabilitación en un Centro de Tratamiento Residencial que está avalado por nosotros, y que el alcalde, el municipio paga el tratamiento completo. Estamos hablando de que va de los 6 mil y los 7 mil pesos mensuales; el municipio tiene becas para quien guste de esas personas que cumplan el perfil puedan acceder a un tratamiento”, precisó.
Posterior al tratamiento en los Centros de Rehabilitación, los usuarios deberán regresar al Hogar de Transición, a una etapa denominada “Medio Camino”; en el que reciben seguimiento psicológico y se les permite pernoctar, para que en el día puedan salir a laborar.
Para ser canalizado al apoyo de un tratamiento contra adicciones, los usuarios del Hogar de Transición deben pasar por una entrevista y firmar un contrato que permita intervenir con el ofrecimiento de diversos beneficios, como lo es el tratamiento, agregó la directora.
“Después de la entrevista se le asigna un psicólogo y se firma algo que nosotros llamamos un contrato terapéutico. La persona lee el documento; el que no sepa leer, nosotros se lo leemos, en el que se le entregan las reglas y cómo va a estar funcionando dentro del hogar de transición. Sí o sí tiene que tener atención psicológica y trabajo comunitario”, relató.
