Ante la violencia que azota a Tabasco, que incluye ejecuciones, ataques a policías, balaceras y extorsión y vandalismo a comercios, 180 efectivos del Ejército llegaron a esa entidad.
Los militares realizarán tareas de seguridad pública, en particular en el municipio Centro, donde está Villahermosa, informó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“Hoy llegan a Tabasco 180 elementos del Ejército Mexicano que reforzarán las tareas para la seguridad y tranquilidad de nuestro pueblo. Agradecemos el respaldo de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y de la Secretaría de la Defensa Nacional. Vamos a recuperar la paz”, posteó por su parte el Gobernador de Tabasco, el morenista Javier May.
Un grupo de 120 efectivos fue concentrado esta mañana en el Hangar 1 de la Guardia Nacional, dentro del complejo del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), para partir a Tabasco.
Otros 60 militares llegarán vía terrestre desde el estado de Campeche.
La inseguridad en Tabasco está desatada, esta madrugada se reportó al 911 la presencia de cuerpos desmembrados en Playas del Rosario, a unos 23 kilómetros del centro de Villahermosa hacia la costa.
Junto a los cuerpos, según informes preliminares, fueron dejadas unas cartulinas con mensajes de amenaza atribuidos al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), que sostiene una guerra con la organización criminal La Barredora.
Además, el lunes y en la madrugada de ayer se registraron ataques a balazos contra policías en Villahermosa, así como reportes de ponchallantas en el nuevo Puente Grijalva II de la colonia Gaviotas.
El Gobierno del estado condenó las agresiones contra elementos de la Policia Estatal que dejaron un oficial muerto y tres lesionados, los cuales fueron hospitalizados y su estado de salud es estable.
Ayer en Nacajuca se reportó el hallazgo de una persona desmembrada, así como al menos un vehículo incendiado en la ranchería Anacleto Canabal, en el municipio Centro.
En tanto, la Fiscalía estatal informó que se reportaron cuatro víctimas de homicidio doloso.
Ante la crisis de seguridad, el inspector jefe de la Policía estatal, José del Carmen Castillo Ramírez, renunció al cargo el pasado 10 de enero.