Red Bull ya tenía decidido destituir al jefe de equipo Christian Horner tras su polémica de presuntas conductas inapropiadas a una persona del staff.
De acuerdo a reportes de medios europeos, el director general de Red Bull, Oliver Mintzlaff, ya había decidido despedir a Horner desde el 2 de febrero, e incluso la escudería de las bebidas energéticas ya hasta habría tenido armado un comunicado de prensa oficial para dar a conocer la noticia.
Sin embargo, Horner no habría aceptado el despido y sus abogados intervinieron con Red Bull en Fuschl para evitar su salida.
Al parecer, Mintzlaff se echó para atrás en su decisión, la cual ya había sido tomada, y ahora Horner se mantiene firme liderando a los Toros Rojos en este arranque de la temporada 2024 en la Fórmula Uno.
La escudería austriaca cerró la investigación interna que realizó alrededor del jefe de equipo, quien no fue castigado debido a que las acusaciones se desestimaron.
Esto sale a la luz pocas horas después de que Jos Verstappen, padre de Max, pidiera la salida de Horner de Red Bull argumentando que su permanencia podría afectar el rendimiento del equipo dentro de las pistas de la F1.