Autoridades recuperaron los cuerpos de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, así como el del guía de turistas Pedro Palma, todos asesinados el lunes en la comunidad de Cerocahui, en Chihuahua.
La Gobernadora María Eugenia Campos fue quien informó la recuperación de los cuerpos de las víctimas, quienes fueron fueron asesinadas en el Municipio de Urique, ubicado en la Sierra Tarahumara de Chihuahua.
“Hemos logrado localizar y recuperar, y esto comprobado por medicina forense, los cuerpos de los sacerdotes jesuitas Javier Campos, Joaquín Mora, y el guía de turistas Pedro Palma, esperamos tener información más adelante, les estaremos informando”, anunció.
La funcionaria de Chihuahua no ofreció datos sobre el lugar ni las condiciones en las que fueron encontrados los cuerpos.
Cerca de las 13:00 horas del lunes, un hombre identificado como “El Chueco” asesinó a el guía de turistas y a los dos sacerdotes jesuitas dentro de la iglesia en Cerocahui.
Pese a que miembros de la comunidad religiosa le pidieron al agresor que no se llevara los cuerpos, “El Chueco” aventó los cuerpos a una camioneta y se retiró del sitio.
En este sentido, el vicario de la Diócesis de la Sierra Tarahumara, Héctor Fernando Martínez Espinosa, confirmó que en el contexto del asesinato de los sacerdotes jesuitas, Joaquín Mora y Javier Campos, ocurrido este lunes al interior de un templo de la comunidad de Cerocahui, Chihuahua, un grupo de sujetos armados se llevó a algunos turistas.
Durante una entrevista con Aristegui en Vivo, aseguró que conocieron de esta situación “en tiempo real” desde el primer momento, pero tuvieron que “guardar seis horas de silencio” para tratar de preservar la integridad de los tres sacerdotes que lograron sobrevivir al ataque, así como la de otras personas que fueron testigos de los hechos.
“Muchas veces nos vemos obligados a callar para proteger a la gente”, explicó, ya que temen no solo el asesinato de los sacerdotes, sino de catequistas y de colaboradores.
“Esto se pudo haber evitado, porque nosotros tenemos una agenda social que se le entregó la gobernadora Maru Campos desde que era candidata y hasta la fecha no hemos podido ser atendidos. Es una agenda que tiene que ver con la regeneración del tejido social, con la organización comunitaria, con atender problemas que hay en los ejidos, la migración forzada”, indicó.
Denunció que se ha intentado sin éxito un acercamiento con el gobierno estatal, con el fin de evitar estas situaciones, porque ya era conocido que José Noriel Portillo Gil ‘El Chueco’, a quien se le señala como uno de los autores de los asesinatos, tenía actividades en las comunidades que forman parte de la parroquia de Cerocahui e incluso instalaba retenes.
“Este gobierno de Maru Campos, sobre el que teníamos muchas expectativas, es un gobierno que no escucha, no atiende y nos duele porque es la primera gobernadora mujer del estado y ahora sale, da la cara, pero en un contexto casi de obligación”, dijo.