Veintiséis de diciembre de 1916, Teatro de la República, Querétaro, Capital Provisional de México y Asiento del Ejecutivo.
Los debates del artículo tercero de la Constitución se pasaron de la fecha, los dictámenes oscilaron mientras se revisan los demás artículos, no hubo desde el comienzo de los debates ¡Un día que no se hablara de reformar, rediseñar o proponer nuevos estatutos a la educación gratuita, laica y pública! Los principales promotores del laicismo eran más anticlericales que buscar ¡Una libertad religiosa! Eso no satisface a los demás diputados.
Ya casi terminado el artículo tercero, las mesas de debate abren otro frente ¡La jornada de ocho horas diarias y goce a un sueldo digno! Entre los debates concernientes en materia del trabajo ¡Tal vez otro pilar de la nueva Constitución! Ya el doce de diciembre le habían recriminado a Carranza que este artículo quinto estaría lleno de innovaciones, dos grandes cuerpos construyen la idea: que todos los contratos que un trabajador puede firmar son de un año como mínimo, con ello garantizaban la lealtad laboral, por el otro que niños y mujeres primero no deberían de trabajar, segundo que no se laborara de noche ¡Prohibiendo la producción de jornadas extenuantes de veinticuatro horas! Adicionaron además que ya no se considerará delito la renuncia de un trabajador.
En estos años las textilerías de Querétaro de la familia de los Cayetano Rubio, en el mantener a los trabajadores bajo tensión y obligaciones hacia el patrón ¡Consideran delito que alguien renunciara! Además de que aprovechándose que los trabajadores no saben leer ni escribir inventan actos en detrimento de quien ofrecía la fuente de trabajo, ocasionando con ello que múltiples cárceles estuvieran llenas de trabajadores que habían renunciado y que no se les volvía a contratar en otro lugar, los patrones enviaban cartas a las demás textilerías para que no los contrataran acusándolos de que habían incurrido en delitos y estaban bajo juicio de la autoridad.
– ¡Esto es innovador! Dejar sin efectos jurídicos la renuncia que se hiciere de ejercer determinada actividad en el futuro – menciona el encargado de la comisión de los artículos concernientes al derecho de los trabajadores el diputado Juan de Dios Bojórquez que representa a la facción de Sonora, de donde es originario, además continua:
“… los patrones han abusado de forma tan aberrante de sus trabajadores que las condiciones inhumanas a que son sometidas, jornadas de trabajo de veinte horas, un sueldo miserable en donde no se les da monedas sino vales para cambiarlos en la tienda misma de su lugar de trabajo, sin goce de días de descanso ¡Esto ha logrado que los patrones se vuelvan extremadamente ricos! Con lujos absurdos y grandes casonas, así como la construcción de teatros, galeras, carruajes, así como el de almacenar grano para después esconderlo y subir así los precios ¡Son unos verdaderos truhanes! Ladrones ¡El infierno mismo se merecen por tanta explotación! …”
¡Se volvieron a encender los ánimos! En una jugada magistral el general Venustiano Carranza había invitado a los textileros, patrones, comerciantes e importante sector comercial de la ciudad, incluyendo al presidente de la Cámara de Comercio de Querétaro Arnulfo Landaverde ¡Único sistema organizado de la ciudad!
Se incluyeron en la galería de invitados los comerciantes dueños de los negocios El Fénix harinera del vicepresidente de la cámara de comercio de Querétaro de Pablo Lozada, La Bella Leonense dedicada a traer ropa de importación del comerciante Luis Veraza que se ubica en la calle del Biombo número cinco, Singer máquinas de coser que la administra Juan Aguilera, La Ciudad de México de las llamadas Cajas de Ropa que la administra el señor Agustín Arnaud, entre otros.
Ellos son los encargados de balancear los debates con la intención de que, cómo dice el sonorense Juan de Dios Bojórquez: – “… ni tanto que queme al santo, ni tanto que no lo alumbre! …” – la intención no es caer en la dinámica de que se volteara del lado solo del trabajador, pero la explotación manifiesta en reuniones con sindicatos de toda la república y en especial de las textilerías es que los trabajadores ¡Siempre tienen la de perder! Esto debería de cambiar, alegaba el diputado.
¡Pocos diputados estuvieron en contra! Además, se establecieron diferentes mejoras obligadas a las condiciones del trabajo: la conformación de Juntas de Conciliación y Arbitraje para que se dejara de considerar delito todo aquello relacionado con el trabajo y se tuvieran lugares dignos de representación para solucionar conflictos entre los patrones y sus obreros.
Adicionaron un delito que se debatía si se colocaba dentro de los considerados penales o era concerniente a los artículos laborales: “…la declaración de que la ley persigue y castiga la vagancia…” cualquier persona que sea considerada sin utilidad al sector comunitario será considerado delito quien no trabaje, no aporte en sustancia a la sociedad o en su familia, así como aquellos que se vean por la calle sin quehacer alguno se dará cuenta a los alguaciles para su detención, en caso de considerase no útil ¡Realizará trabajo para el ayuntamiento! O cualquier sector del gobierno que necesite trabajadores.
¡Alzaron la voz varios diputados!
Luis G Monzón establecía que se tenía que dar como delito contra la sociedad la vagancia, por considerarse que implica deterioro al desarrollo de las ciudades y regiones “… una persona que no hace nada, no produce o falto de creatividad lesiona severamente las actitudes de sus cercanos…” Diputados de las facciones conservadoras o de aquellos pagados por la iglesia mexicana como José Manzano de Jalisco y Esteban Baca Calderón que inclusive son acusados de huertistas, debido a que la iglesia católica siempre apoyó a Huerta ¡A pesar de que los diputados jaliscienses son grandes oradores! Haber propuesto “Ley del bien familiar” estimular los modelos de “cajas de ahorro” o “cooperativas agrícolas” base de las economías conservadoras del siglo diecinueve, demeritan su participación en los debates concernientes al delito de “Vagancia”
Al avanzar el debate se consideró que el delito de vagancia también aplica a aquellos abogados que desean saltar a ser jueces por medio de no acreditar un trabajo social ¡Lo cual cambió por completo la perspectiva! – “… la riqueza y el oprobio con que los abogados viven, en mansiones y adelantos económicos considerables, debe por ley acercarse a que durante todo un año ¡Realicen servicio social en los tribunales antes de ser considerados propicios para jueces! …- se desechó esta reforma por considerase fuera de tiempos, ocasionado por un error en la fecha de las carátulas, que se había puesto 22 de diciembre cuando correspondía al doce ¡Ese tema ya se había desechado!
Los demás comerciantes que estuvieron en los debates concernientes a los artículos sobre el trabajo no se quedaban callados y solicitaban hablar, como en las mesas anteriores a este artículo la comisión había dejado claro que la presencia de los patrones era solo por dar balance, así que en un tiempo que se tuvo se les dio la oportunidad de que en las mesas de trabajo ellos dieran alguna propuesta a su representante el diputado José María Truchuelo, fueron a la casa anexa al Teatro de la República y comenzaron las discusiones.
– ¡Que de saberse señores antes de ser escuchados! Que no habrá vencidos, estamos ante una reforma al sistema que ya será letra escrita, no podrán cambiar ninguna de las mociones expuestas, deseamos dar el derecho de ser escuchados…- les menciona el diputado queretano a todos quienes están incluidos en la Cámara de Comercio de Querétaro, continuó:
– Es menester que sepan que su labor como gremio de comerciantes tampoco les permite cambiar las leyes, ni estar de acuerdo en lo que aquí se vota ¡Cumplimos las voluntades del pueblo proporcional a lo que ellos no dicen! Todos y cada uno de los diputados venimos a manifestarlo, tanto en estados de extensiones grandes como pequeños, así que sépanse escuchados, si considero que ustedes aportan beneficios a las condiciones de sus trabajadores lo subiré a comisiones, estoy para servirles sin dejar de mencionarles que en estos nuevos artículos los trabajadores tendrán derecho a huelga, si es que se considera se violentan sus condiciones, garantías de seguridad de su porvenir, jornada justa y trato digno… entre otros-.
¡A ninguno de los comerciantes de la cámara les gustó el artículo! Comenzó el dueño de la fábrica El Guerrillero, una curiosa y productiva fábrica de cigarros que utiliza máquinas al vapor, que se ubica en la calle de Velázquez número ocho:
– ¡Señor diputado la verdad es que venir a las mesas y estar presente en los plenos del constituyente sirven para una chingada ¿Para qué nos invitó el general Carranza? Cada debate en contra de los patrones ¡Todos nos voltean a ver y nos acusan con el dedo! Es una grave falta de respeto – ¡Le solicito nos conduzcamos con tranquilidad! – Dijo el diputado Truchuelo – No estoy de acuerdo con la huelga ¿Qué pasa si cada dos meses me piden un aumento de sueldo? ¿De dónde lo voy a sacar? Si ellos producen más ¡Yo no vendo más! Pero si ellos producen menos ¡Yo sí pierdo! – ¿Alguien más desea participar? – dijo el diputado Truchuelo.
¡Se animó el dueño de la fábrica de ladrillos La Purísima! Francisco Urquiza, ubicada en la hacienda de Jurica.
– ¡Señor diputado! Es importante que usted tenga a bien escucharnos con calma, pertenecemos a la Cámara de Comercio desde su fundador Don Desiderio Reséndiz ¡Que en gloria esté! Nuestra labor es estar todos organizados para mejorar nuestras condiciones, no solo de crecimiento, sino de lograr que junto con nuestros trabajadores logremos una comunidad productiva en donde todos salgamos ganando ¡Soy uno de los comercios que más vende! Uno de los que más quiere a sus trabajadores, les otorgo beneficios de construir sus casas cercanas a la fábrica ¡Son de ellos! En mi propio terreno, les damos despensas y por intercesión de mi señora esposa ¡Les damos un ahorrito cada año de lo que sacamos de ganancia! Somos buenos patrones – continuó ¡Le cambió el semblante! – Si ustedes colocan la ley o eso que ustedes hacen… les dan ideas a los trabajadores de lo que debe ser, sin explicarnos de dónde sale ¡Pues todos se me van a voltear! Se sentirán cobijados por la ley ¡Seguro me llueven el abandono o abuso de mis trabajadores!
El diputado Truchuelo anota con atención lo dicho por el comerciante ¡Un apoyo de las ganancias suena bien para subirlo a la mesa de la comisión del diputado Bojórquez! Incluso pensando en la figura qué sería lo mejor. Escuchó a todos, atendió las solicitudes, pidió de favor que si se sentían agredidos ya no entraran, pero que era importante su presencia como testigos de honor de las comisiones ¡Unos accedieron a retirase! Los restantes volvieron a entrar al Teatro.
El diputado por el estado de Hidalgo Alfonso Cravioto, que Huerta lo había encarcelado y que ahora estaba encargado de Educación, alegaba que, así como Francia había elevado su Constitución después de su revolución como mayor máxima los derechos individuales de las personas ¡Así esta nueva Constitución debería de exponer como su máxima el derecho fundamental del obrero! Que inclusive se tuviera que realizar un solo artículo referente a esta máxima.
Ese mismo día el diputado Modesto González Galindo que representa al estado de Tlaxcala hizo uso de la palabra con un discurso que dejó helados a todos los diputados:
“… deseo que el artículo treinta y nueve que dice que la soberanía reside en el pueblo ¡Sea excluido! ¡Asiento un principio falso, porque un pueblo analfabeto, oprimido por el capitalista y sufriendo, no es y no puede ser soberano! …” Solo eso dijo ¡Bastó para que todos los diputados levantaran una ovación! Aplausos y vítores para el oriundo de Huamantla – ¡Desde este momento! – dijo Carranza- Esta Constitución implica en todo lo concerniente para que nuestra nación ¡Observe al pueblo como único mandato!
Rivera del Río, cercano al Puente Viejo.
El alguacil lleva ya varios días indagando la aparición de dos cuerpos en el río, por una parte, uno parece bien comido y arreglado ¡Se nota un hombre de guerra! Al preguntar a los coroneles que custodian la ciudad ¡Nadie le reconoce por las señas! En especial una cicatriz que tiene en el cuello y el otro cuerpo encontrado, pareciera alguien de alcurnia ¡Sus mano suaves y delicadas! No tiene rostro, le habían cercenado de manera cruel ¡Coincide que fueron baleados con un arma de tiro personal japonés! De uso exclusivo de las fuerzas armadas de Carranza ¡Apunta a uno de sus hombres! Así que hace por sacar cita con el coronel de guardia de la ciudad Herminio González, acreditado inclusive como escolta del propio jefe supremo.
Lo citó cercano al Teatro de la República, en un merendero muy concurrido ¡Nada tonto el alguacil! Sabe que ahí no puede hacer nada impulsivo.
Una vez llegaron ambos el alguacil simplemente le preguntó por los dos cuerpos, notando que tenía un rasguño el coronel en una de sus mejillas ¡Como si una mano lo hubiera lastimado! – Usted me pregunta señor alguacil ¡Cómo si supiera algo! ¿Qué le hace saber esto? – mientras el alguacil prende otro de sus cigarros a los que se ha hecho ya vicio – Mire señor coronel, cierto es que todo el bullicio de la ciudad gira en el constituyente ¡Pero los que llegaron fueron ustedes! Aquí no teníamos problemas de este tamaño, quizá algún joven perdido en el cerro del Pathé, pero hasta ahí ¡Llegan hombres armados! Hay señoritas lindas en la ciudad, usan su poder a beneficio personal, enamoran a las chicas y luego comienzan los celos ¡Hay mucha pasión en estos asesinatos coronel!
– ¿Qué le hace pensar que son asesinatos? Pudieron haber muerto de manera natural, sus lesiones son comunes de la fauna de la región – dijo el coronel- ¿De manera natural? Los perros por alguna razón nunca se comen la carne de los rostros, de las extremidades y vísceras sí… -luego de pensar el alguacil le preguntó- ¡En ningún momento le mencioné cómo encontramos los cuerpos! Mire coronel se que tiene asuntos relevantes que atender ¡Pero le pido de favor que mañana temprano nos volvamos a ver! Creo tiene mucho que contarme.
El alguacil tomó hacia la salida ¡Los hombres del coronel taparon el portón! Él aun sentado en la mesa con una mueca les hizo saber que lo dejaran pasar ¡Ellos obedecieron! Salió del merendero rumbo del jardín principal ¡Al sentirse perseguido caminó más rápido! Era tanta su prisa que salió de la ciudad en un palmo ¡Cuando le alcanzaron en la Alameda lo tundieron con las bayonetas! Al escondrijo de los eucaliptos.
Continuará…