Desde la comunidad de El Coyote, en Amealco de Bonfil, César Mondragón Antonino, de 12 años, y Alondra Cosme González, de 11, representarán a Querétaro y al Semillero Creativo de Teatro y Fotografía de dicha demarcación, en el magno evento de cultura comunitaria que organiza la Secretaría de Cultura del Gobierno de México ’Tengo Un Sueño’, que tendrá lugar en el Auditorio Nacional el jueves 24 de noviembre.
Para su participación se prepararon durante una semana junto a la docente y enlace estatal Tania Santos, en el campamento creativo de Oaxtepec, Morelos, donde niños, niñas y jóvenes de todo el país se reúnen para ensamblar los diversos números escénicos, visuales y musicales que integrarán el espectáculo.
Querétaro tendrá su intervención como parte del Semillero Nacional de Teatro en la apertura del evento con la pieza Entreacto 1, de la mano del actor y cuentacuentos Mario Iván Martínez y junto a integrantes de semilleros de Arcelia, Guerrero; Playas de Rosarito, Baja California; Pomuch, Campeche y de Atlixco, Puebla.
El Semillero Creativo de Amealco de Bonfil se encuentra en funcionamiento desde 2019 y aunque su principal disciplina es el teatro, también realiza actividades de pintura y fotografía. Este es el segundo año consecutivo que participa en este encuentro, pues en 2021 cuatro integrantes -dos del grupo infantil y dos del juvenil-, presentaron la pieza “El coyote y la iguana”, junto a la actriz Yalitza Aparicio.
Cabe señalar que este evento de cultura comunitaria contará con la presencia en el escenario de grandes artistas como Lila Downs, La Sonora Santanera, Horacio Franco, Alejandra Robles, Lyla June, la bailarina Elisa Carrillo, la rapera oaxaqueña Mare Advertencia Lirika y el grupo chileno 31 minutos.
Tengo Un Sueño es un espacio de encuentro y pronunciación contra el racismo y clasismo, así como una manifestación de talento y disciplina que conjunta el esfuerzo de todo el equipo de Vinculación Cultural del Sistema Nacional de Fomento Musical, de docentes, de cada participante que pone su corazón y la riqueza de sus comunidades, así como de las familias, que en el caso de Querétaro siempre están al pendiente de sus hijos e hijas y apoyan en cada actividad al Semillero, lo cual garantiza el derecho a la cultura y alienta el pensamiento crítico y la participación comunitaria.
