El vicario de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril señaló que el Obispo de Querétaro, Fidencio López Plaza, presentará su renuncia al Papa Francisco luego de que cumpla los 75 años el 28 de abril de 2025, esto con base al derecho canónico, en el cual se señala que los obispos deben presentar su renuncia al pontífice una vez que cumplan la edad de 75 años.
Lara Becerril explicó que no hay un plazo definido para la aceptación de la renuncia, por lo que el obispo López Plaza continuará liderando la diócesis hasta que se tome una decisión desde el Vaticano; la aceptación de dicha renuncia queda a discreción del Papa, quien puede decidir el momento oportuno para su efectividad, además de que él es quien tiene el encargo de elegir al sucesor que estará al frente de la Diócesis de Querétaro.
El proceso de sucesión episcopal debe de desarrollarse en diversas veces una vez que de manera formal se haya presentado la renuncia, pues primero debe ser aceptada por el Papa, posteriormente, la Nunciatura Apostólica en México elabora una terna de posibles sucesores, la cual es enviada al Vaticano para su consideración. Durante este periodo de transición, si la sede episcopal queda vacante, se nombra un administrador diocesano para asegurar la continuidad en la conducción de la diócesis.
“El proceso de sucesión episcopal es complejo y puede llevar tiempo. Mientras tanto, el obispo Fidencio López Plaza continuará guiando a la Diócesis de Querétaro con el mismo compromiso y dedicación que ha demostrado desde su llegada, quien decide su sucesor es justamente el Papa desde El Vaticano”, afirmó.
Desde 2020, Fidencio López Plaza ha estado al frente de la Diócesis de Querétaro tras ser nombrado por el Papa Francisco; el actual obispo es originario de San José Iturbide, Guanajuato y se ha desempeñado en diversos cargos pastorales en la región, incluyendo su labor como vicario de pastoral, lo que le ha permitido conocer profundamente las necesidades y desafíos de la diócesis. Su liderazgo ha sido clave en el fortalecimiento de la comunidad católica local sobre todo durante el tiempo de pandemia.