La Cámara Nacional de Comercio (CANACO), en la delegación Querétaro, en conjunto con la New Element University y la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio, anunció la realización del Foro “Los Beneficios de la Formalidad”.
Esto, con el objetivo de apoyar a las empresas a que fortalezcan sus negocios, que seprepare para competir dentro del mercado, generando mayores oportunidades, mejoresconexiones con otros empresarios, con más y mejores ventas.
El titular de CANACO en la entidad, Fabián Octavio Camacho Arredondo, aseguró que en Querétaro se ha detectado un incremento de entre el 5 y el 7 por ciento de comercios que trabajan en la informalidad, sin solventar la tramitología y permisoscorrespondientes de operación.
Reconoció que, debido a las afectaciones económicas por la pandemia de COVID-19,este tipo de comercio aumentó, ante la necesidad de la sociedad.
“El desafío que tenemos en Querétaro es que, aún cuando la economía y las unidadestienen una estabilidad relativa en comparación a lo que sucede en el país, sí traemos un dato en el cual, al menos después de la pandemia, ha crecido ligeramente lainformalidad”.
Por ello, Fabián Camacho indicó que las estimaciones señalan que, de las 90 milunidades económicas que tienen registro vigente en la entidad, el 30 por ciento podríaestar laborando en esquemas de la informalidad.
Además, según la Encuesta “¿Cómo vamos, México?, en Querétaro cerca de 40 porciento de los trabajadores forman parte de negocios informales o no están contratadosde manera regular, ante el Instituto Mexicano del Seguro Social.
“Es un fenómeno que va creciendo, que hoy en día se requieren argumentos fuertes, soluciones fuertes, para que la gente que se ha salido de la formalidad a la informalidad regresen; y que las unidades de negocio que se están desarrollando tengan criterios de formalidad y de formalidad en la generación de fuentes de empleo”.
Por último, Camacho Arredondo señaló que los productos que son comercializados por negocios informales, principalmente, son ropa, accesorios, artículos tecnológicos y de belleza.
“Suelen ser mercancías de dudosa procedencia, y que vulnera el ejercicio del consumidor, porque independientemente del costo que implique, que casi siempre son más baratos, son productos de dudosa y muy baja calidad”.
