Comprar lo que necesitamos y queremos sin afectar la economía familiar requiere planificación y organización. En México, casi 6 de cada 10 personas no lleva un registro formal de sus gastos del hogar (INEGI, Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2024), y más del 40 % reconoce que alguna vez ha tenido dificultades para cubrir compras importantes, desde electrodomésticos hasta muebles o tecnología.
Una estrategia efectiva es diferir los pagos de manera responsable. Herramientas como el Préstamo Elektra permiten distribuir los pagos de productos de valor de manera flexible y accesible. Además, quienes pueden adelantar sus pagos terminan pagando menos, una opción que promueve la planificación y el ahorro sin comprometer el presupuesto familiar.
Tips para compras inteligentes y controladas:
1. Haz una lista de prioridades: identifica qué necesitas realmente y qué es un extra. Esto ayuda a no gastar de más en productos que no son esenciales.
2. Calcula tu capacidad de pago: revisa cuánto puedes destinar al mes sin afectar otros gastos.
3. Usa pagos a plazos de manera estratégica: no todas las compras requieren pago inmediato. Distribuir pagos puede ayudarte a adquirir lo que necesitas hoy y mantener equilibrio financiero.
4. Revisa tus movimientos regularmente: llevar control de lo que pagas y lo que resta por cubrir evita sorpresas y te permite ajustar tus gastos.
Según la CONDUSEF, quienes planifican sus compras y utilizan mecanismos de financiamiento de manera consciente reportan mayor control sobre sus finanzas y menor estrés por gastos inesperados. Por ejemplo, planear la compra de una pantalla, un refrigerador o una lavadora y programar los pagos permite disfrutar del producto sin que represente un golpe al presupuesto.
Al final, se trata de tomar decisiones inteligentes: saber qué comprar ahora, qué esperar, y cómo distribuir los pagos de manera que beneficie a la economía familiar. Usar herramientas como el Préstamo Elektra de forma consciente permite acceder a lo que se necesita hoy, aprovechar promociones y descuentos, y pagar menos si se adelantan cuotas. Una buena planificación convierte cada compra en una experiencia positiva y segura, sin comprometer la tranquilidad financiera.







