La ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña, dijo que las críticas al sistema de justicia en México deben partir de la verdad y la honestidad, además de que cualquier reforma judicial debe poner en el centro a las víctimas y a los usuarios del sistema de justicia.
“Critiquemos partiendo de la verdad, de los datos ciertos, de las cifras correctas valoradas en su contexto, critiquemos con honestidad, critiquemos con responsabilidad de Estado”, dijo durante su participación en el primer foro Diálogos Nacionales sobre la Reforma al Poder Judicial, celebrado ayer en la Cámara de Diputados.
Norma Piña afirmó que Justicia en México no es monopolio del Poder Judicial, se mostró dispuesta al diálogo y dijo que no debe pesar más la celeridad que la idoneidad.
“El paso veloz sólo puede dar entrada a problemas mayores (…) por ello en la reforma que hoy nos convoca no debe pesar más la celeridad que la idoneidad”, sostuvo.
La Ministra Presidenta de la Corte dijo que una reforma al Poder Judicial implica “como mínimo” reflexionar sobre el papel que desempeña éste como piedra angular al resolver “de manera imparcial e independiente los conflictos que surgen en una sociedad democrática”.
Piña Hernández pidió aplicar una crítica en la que se centren las necesidades de las víctimas.
“Critiquemos partiendo de la verdad, de los datos ciertos, de las cifras correctas valoradas en su contexto. Critiquemos con responsabilidad de estado”, afirmó.
En los minutos finales de su discurso, la Ministra Presidenta se dijo “convencida de que en distintas visiones de cómo mejorar la justicia en México encontraremos más coincidencias que divergencias”.
Piña Hernández fue la penúltima ponente de esta primera jornada de diálogos que se extendió por casi cuatro horas y en la que 35 personajes, entre legisladores e integrantes del Poder Judicial, expusieron sus argumentos a favor y en contra de la reforma que presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador en febrero pasado, que incluye la elección de ministros, magistrados y jueces por voto popular; la reducción del pleno de la Suprema Corte y la separación de esta y del Consejo de la Judicatura Federal.
“Estamos convencidos de que escuchar es la práctica clave para proponer un cambio. Estamos abiertos a entablar un diálogo, un diálogo responsable, pero para dialogar se requiere voluntad de reflexión, resolvamos nuestras diferencias en el ancho camino del entendimiento, diluyendo así la idea de una decisión tomada”, indicó.
El lugar junto al de Piña Hernández, que estuvo vacío durante todo el foro, era para el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, cuya participación estaba confirmada, pero no llegó y en su lugar acudió un representante que no emitió postura.