Hacia el cierre de año, la relocalización de la producción (nearshoring) hacia México podría registrar una pausa, destacó Monex Grupo Financiero en un análisis.
El grupo financiero indicó que algunas empresas han pospuesto nuevas inversiones y proyectos en México, aunque algunas otras compañías continúan avanzando nuevos desarrollos.
“Nuestra visión es que el nearshoring se mantiene en una etapa de anuncios de inversiones, esperando a que se disipen las dudas para concretarlas en un futuro, y poder visualizar sus efectos en indicadores como en la IED”, señaló.
En su reporte, la firma dijo que persiste la preocupación sobre el entorno económico local (además del político) y sobre los resultados de las elecciones en Estados Unidos (ante la posibilidad de que se impongan medidas comerciales estrictas bajo un segundo mandato de Trump).
En el plano interno, dijo, diversos inversionistas mantienen cierta cautela por la reciente aprobación de reformas constitucionales (puntualmente a la judicial) y por indicios de una menor actividad económica prevista para el cierre de 2024 e inicio de 2025.
Destacó que en el segundo semestre del año se han observado señales mixtas en el nearshoring, por el lado positivo, hay una importante demanda de espacios industriales en ciertas regiones del país (Norte, Centro y Bajío), además de nuevas inversiones (Foxconn, principal proveedor de Nvidia) y expansiones (BMW y GM); y, en el lado negativo destacan las pausas de inversión de Tesla e Intel, a la espera del resultado electoral en Estados Unidos.